Serge Ibaka: “Orlando es el desafío que necesitaba para no acomodarme”

Serge Ibaka llegó con 17 años a España, a la Liga ACB con 19, a la NBA con 20 y, con 22, firmó con Oklahoma City Thunder el contrato de su vida, 49 millones de dólares por cuatro años. Le queda todavía un año para cumplirlo, pero eso en la NBA es tan relativo como que, de un día para otro, la noche del draft en concreto, el equipo en el que ha jugado las siete temporadas allí, decidió traspasarlo a Orlando Magic. Allí fue presentado el jueves, pocas horas antes de que la selección española se concentrara para unos Juegos en los que este congoleño de 26 años, nacionalizado español en 2011, no competirá.

Pregunta. ¿Cómo se enteró de su traspaso?

Respuesta. Estaba en París. Me desperté, cogí el teléfono, vi los tuits, los mensajes que me habían llegado, me llamó mi agente… Oklahoma ni me llamó.

P. ¿Cómo digirió la noticia?

R. Siempre doy las gracias a Dios porque todavía puedo levantarme cada mañana y hacer lo que me gusta, seguir jugando a baloncesto, y eso es lo más importante. No voy a estar quejándome o llorando, la vida continúa. Hay gente en peor situación que yo, que no juega en su equipo o que tienen que jugar en equipos más mediocres en Europa.

Me enteré de mi traspaso cuando me desperté en París, cogí el móvil y vi el Twitter y los mensajes

P. ¿Qué opinión le merece Orlando Magic, que lleva cuatro temporadas sin meterse en los playoffs?

R. Es un buen equipo para mejorar, para medir mi talento, para ver qué más puedo hacer. No es fácil. Supone un gran compromiso. En Oklahoma contaba con un buen equipo. Luchamos por el anillo los siete años que jugué allí. Pero, a veces, en este mundo, para dar un paso adelante tienes que proponerte un reto más difícil del que tenías allí donde estabas muy cómodo. Es el desafío que necesitaba en mi vida para no acomodarme, un buen test para mí.

P. Orlando dejó escapar a un jugador con mucha proyección como Oladipo, a otro ya consolidado como Ilyasova y los derechos de Domantas Sabonis. ¿Qué le dice eso?

R. Demuestra hasta qué punto me quieren. Que confíen en ti de esa manera te da mucho valor y, si cabe, más ganas. He hablado con el director general (Rob Hennigan) y el entrenador (Frank Vogel, fichado tras su etapa en Indiana). Deseo devolverles la confianza que han depositado en mí. Voy a aprender allí, a adaptarme, a hacer amigos en Orlando. A Hezonja le he visto poco jugar. Tengo ganas de trabajar con él. Me han comentado que tiene mucho talento.

P. Su contrato expira el próximo año. ¿Cuál es su perspectiva?

R. Ahora estoy totalmente focalizado en Orlando Magic y en intentar clasificarnos para los playoffs la próxima temporada. Mi mente está puesta en ello, no en mi próximo contrato.

P. ¿Cómo ve su futuro en la selección española tras haber llegado a un acuerdo por el que no estará en los Juegos de Río?

R. Me ha costado llegar a ese acuerdo y seguramente también al seleccionador y a la federación. Al final, hay que ver qué es lo mejor para la selección y para mí. Pero no ha cambiado nada, la selección sigue siendo mi equipo, solo que este verano no voy a jugar con él. Seguiré apoyando a mis compañeros y estaré con ellos. Lo mío con la selección no se ha acabado. Me gustaría tomarme la revancha del Mundial y en los Juegos de Londres me lo pasé muy bien. Veremos qué pasará. Todo está muy bien.

P. En el comunicado que emitió de manera conjunta con la federación se hace explícito que físicamente no está al cien por cien. ¿Cómo se encuentra?

R. Estoy bien. No es una cuestión solo física, sino también mental. Pero no es el fin del mundo. Contamos con una de las mejores selecciones del mundo. En los Juegos estará Estados Unidos y nosotros. No hay otro equipo como nosotros. El reto será, como siempre, ganar a los americanos.

P. Los ve más vulnerables sin LeBron, Curry, Leonard, Davis…

R. No se trata de sus bajas. Tienen tantos buenos jugadores que pueden formar varias selecciones. El problema es cómo afrontará España el torneo. Para mí la clave será la defensa.