Kimmich, el futbolista cobaya
Utilizado como central por Guardiola en el Bayern, el medio le resuelve a Alemania, que juega ante Eslovaquia, su problema en el lateral derecho
Dos fueron los problemas con los que Alemania llegó a la Eurocopa. La ausencia de un delantero centro y el hueco dejado por Lahm en el lateral derecho. Joachim Löw ha encontrado la solución para la delantera en un viejo recurso, Mario Gómez, ante la ineficacia de Götze. En el caso de la defensa, el técnico ha tirado de la polivalencia de Joshua Kimmich, centrocampista del Bayern de 21 años que volverá a actuar de lateral derecho en el duelo de octavos de Alemania ante Eslovaquia (18.00).
La retirada de Lahm tras la conquista del Mundial de Brasil en 2104 abrió una brecha en la zaga de Alemania. Löw experimentó con diversas opciones hasta que ante Irlanda del Norte le dio el puesto a Kimmich. El excelente rendimiento del joven futbolista de Rottweil en el lateral ha hechizado a los técnicos germanos. Fue un rayo por su banda, generando cuatro ocasiones de gol, recibiendo más faltas (2) que las cometidas (1) y realizando dos remates a la puerta norirlandesa. La explicación a cómo un centrocampista defensivo destaca de lateral derecho radica en la magnífica polivalencia de Kimmich. Tan bien jugó frente a Irlanda del Norte que las comparaciones con Lahm surgieron de inmediato. “He jugado un partido como lateral con la selección, pero Lahm es el mejor lateral derecho del mundo. No me desagrada escuchar estas comparaciones, pero no tienen mucho sentido. Acabo de empezar a jugar al fútbol ”, afirmó el propio Kimmich.
Guardiola alabó de Kimmich su pasión por aprender y ser un gran futbolista
Unas palabras que demuestran prudencia y responsabilidad. Valores que llevaron a Pep Guardiola a colocarlo de central en el importante duelo de octavos de la Liga de Campeones ante la Juventus. Kimmich cumplió su cometido, fiel a su disciplina y su capacidad de adaptación. Kimmich realizó la tarea, fiel a su disciplina y su capacidad de adaptación. Capaz de superar, por ejemplo, un error que permitió al juventino Dybala hacer un gol en ese partido.
Justo después del Dortmund-Bayern de la 25ª jornada de la Bundesliga, las cámaras recogieron una bronca de Guardiola al joven jugador alemán. “Es un súper, súper, súper, súper jugador. Quiero a este chico. Me gusta trabajar con jugadores que aprenden y que siempre quieren dar más. Él tiene ese deseo y esa pasión”, explicó el catalán después de reprenderle por alguna acción desafortunada en el partido ante el Dortmund.
“El seleccionador ha escogido bien. Ha sustituido a un campeón del mundo con buenos resultados”, afirmó Höwedes, el compañero que jugó los dos primeros partidos de Alemania en el lateral derecho. Höwedes, central del Schalke, sufrió una enormidad en la banda. Le honra su sinceridad tras ser reemplazado por Kimmich, quien curiosamente, se estrenó con Alemania en un duelo amistoso ante Eslovaquia. Ganaron los eslovacos (1-3) y Kimmich actuó de central, con algunas lagunas defensivas.
Resuelto el entuerto del lateral derecho, Alemania debe pulir algunos defectos más para engrasar una maquinaria que se presupone casi perfecta. En primer lugar, mejorar su eficacia. Los tres goles anotados en el torneo no se corresponden con su dominio del balón y las llegadas al área rival. A su favor cuenta no haber recibido ni un solo gol en el torneo. Su defensa más fiable, Boateng, es duda.
Eslovaquia se encomienda a su espíritu y a la calidad de Hamsik, un solista de talento y gol en medio de un grupo de entusiastas. Pekarik (jugará con una protección en su nariz por una fractura), Hubocan, Mak y Miroslav Stoc han superado diversas molestias físicas y estarán a disposición de su entrenador, Jan Kozac.
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