Manda Quinteros, juega Noboa

Cuando la selección de Ecuador cayó eliminada en la fase de grupos en Brasil 2014, en el seno del grupo de la Tricolor se instaló la polémica. Una disputa por el reparto de los premios tras el Mundial dejó a la plantilla dividida. Hasta que en enero de 2015, el argentino Gustavo Quinteros tomó las riendas del conjunto ecuatoriano. “Hay que formar grupo que esté comprometido con mi proyecto”, advirtió el entrenador santafesino, nacionalizado boliviano. Aunque quedaron olvivados los resquemores entre la plantilla, en la Copa América de Chile en 2015, Ecuador hizo rápido las maletas: se fue en la primera ronda. Sin embargo, una vez que comenzaron las eliminatorias rumbo a Rusia 2018, la tricolor de Quinteros sorprendió a toda Sudamérica, líder del grupo junto a Uruguay. Y hoy luchará por un lugar en las semifinales de la Copa América Centenario ante Estados Unidos.

“Gustavo le está dando a Ecuador el estilo de juego que la selección necesitaba. No de casualidad estamos líderes en las eliminatorias y en los cuartos de final de la Copa”, explica Felipe Caicedo, uno de los símbolos ecuatorianos, que se quedó fuera de la Copa América Centenario por una lesión muscular; “ahora tenemos un estilo de juego ofensivo, acorde al futbolista ecuatoriano. Nos ha potenciado”. Y suma Cristhian Noboa: “Quinteros es un entrenador que siempre busca que el equipo juegue al ataque. Quiere que Ecuador sea protagonista”, asegura. Caicedo entiende que una de las claves de la Tri es la relación que tiene Quinteros con el grupo. “Es un entrenador muy cercano, escucha al jugador. Y eso siempre el futbolista lo agradece”, concluye el ariete del Espanyol. “Le gusta conversar con los futbolistas, quiere saber si todo va bien. Nos ayuda”, remata Noboa.

El Xavi de Ecuador

Mientras Quinteros manda en el vestuario, Noboa manda en el campo. “Cristhian es el jugador que todo técnico quiere tener. Se fue muy joven a Rusia, un fútbol muy diferente y con un clima muy complicado; ha madurado muchísimo”, explica Eduardo Hurtado, exdelantero de la selección ecuatoriana. Con 21 años, Noboa emigró a la liga rusa, jugó en el Rubin Kazán y en el Dinamo Moscú y tras un breve paso por Grecia en 2015 (PAOK), regresó al FC Rostov. “Cristhian es un ídolo en Rusia, su mujer es de allí y él está muy adaptado”, cuenta Caicedo. “Su primer año en Rusia fue difícil, pero supo salir adelante. Ahora es un relojito. Es el típico jugador que todo entrenador quiere tener. Entiende todo el juego y maneja a todo el equipo. Sabe defender, sabe atacar, junta las líneas. Es el Xavi Hernández de Ecuador”, concluye Hurtado.