Bakambu impulsa al Villarreal

En su aniversario, en el día que cumplía 93 años de vida, el Villarreal se regaló una victoria en Europa con oficio y empaque ante un rival reputado, el Bayer Leverkusen, vencido en El Madrigal por el conjunto de Marcelino al que no le tiembla el pulso en las grandes citas y ante clubes con más historia y poso. Se siente seguro en El Madrigal, sin encajar un gol en los cinco partidos de competición disputados en la temporada. Bakambu se llevó todos los honores, sacando lustre al trabajo coral de los amarillos, herméticos una vez más, anotando los dos goles del Villarreal que le acercan a los cuartos de final y le permiten soñar.

Soldado, como mal acostumbra, tuvo la primera ocasión para el Villarreal a los dos minutos. Evidencia el Leverkusen que toda la alegría ofensiva de que dispone se transforma en tristeza en defensa. A los cuatro minutos de juego, Soldado, negado ante el gol, se resarció como pasador asistiendo a Bakambu para que el congoleño anotase con solvencia a la salida de Leno, vendido por los centrales, a los que Bakambu ganó la espalda en el límite del fuera de juego.

Se ha convertido Soldado en un 10, un excelente segundo delantero o mediapunta cuyos movimientos resultan indescifrables en ocasiones para los zagueros contrarios y que ofrece soluciones de pase a los jugadores del centro, formado por Bruno y Trigueros en el eje, con Denis Suárez esta vez en la banda derecha y Samu Castillejo en el costado izquierdo. Marcelino reservó poco para la vital cita del domingo en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla. Alejado de los primeros puestos en la Bundesliga, Roger Schmidt también tiró el resto.

Fue un comienzo esperanzador para el Villarreal ante el Bayern, poderoso en ataque, dirigido con calidad por Çalhanoglu, con el habilidoso Bellarabi arrancando desde el costado derecho, con el recuperado Kiessling y Chicharito en punta, también peligrosos los alemanes en las jugadas a balón parado ofensivas. El equipo amarillo se veía obligado a tener máxima atención defensiva, nada nuevo para el Villarreal, hasta la fecha imbatido en El Madrigal.

Presión sin descanso

Desde la banda, Marcelino ordenaba a sus jugadores que no dejaran pensar y ejecutar al Leverkusen, presionando sin descanso y con tensión, minimizando el ataque alemán, sin ocasión alguna en el primer acto salvo un cabezazo inocuo de Chicharito. Sí la tuvo el Villarreal, de nuevo Soldado, rematando de espuela un centro raso de Castillejo.

Adelantó líneas el Leverkusen tras el descanso, apareciendo la faceta defensiva del Villarreal, nada que le inquiete en demasía, cómodo con espacios en ataque. Cayó en la trampa el Bayern. Tras un saque de esquina a favor de los alemanes, el equipo castellonense cazó una contra aprovechada por Bakambu. En una carrera de velocista de más de 50 metros, el internacional congoleño, pleno de potencia, se plantó ante Leno, al que batió por bajo. El quinto gol de Bakambu en Europa. Las desgracias para el Leverkusen no quedaron ahí al tener que abandonar Kramer el terreno de juego conmocionado por un balonazo involuntario de Rukavina.

La ventaja no hizo más que acentuar la propuesta prudente del Villarreal, sin perder la vista el área germana, con apariciones ante Leno cada vez más residuales, defendiendo hasta el final un resultado, que pudo ampliar con un cabezazo de Baptistão, que le acerca a los cuartos de final.