Agónico empate de España ante Eslovenia
Un postrero gol de Ugalde salva un partido en el que la selección de balonmano siempre fue a remolque
Un gol a falta de veintidós segundos del extremo Cristian Ugalde permitió a España rescatar un empate (24-24) ante Eslovenia, en un encuentro en el que el conjunto español, incapaz en todo momento de dotar de ritmo a su ataque, siempre fue a remolque del conjunto balcánico.
Eslovenia, 24 - España, 24
Eslovenia: Skof; Marguc (2), Miklavcic (2), Bombac (4, 1p), Mackovsek (2), Zvizej (6) y Gaber (2) -equipo inicial- Skok (ps), Blagotinsek (-), Kavticnik (3), Skube (1), Poteko (-), Cingesar (-), Zorman (-), Zarabec (-) y Gajic (2, 1p)
España: Pérez de Vargas; Victor Tomás (3), Maqueda (2), Guardiola (1), Morros (-), Del Arco (-) y Rivera (5, 4p) -equipo inicial- Sterbik (ps), Gurbindo (-), Raúl Entrerríos (3), Aginagalde (6), Ugalde (1), Cañellas (2), Antonio García (1), Mindegia (-) y Dujshebaev (-)
Marcador cada cinco minutos: 2-1, 5-2, 8-5, 10-7, 12-8 y 13-10 (Descanso) 15-13, 17-15, 18-18, 20-20, 23-21 y 24-24 (Final)
Arbitros: Gousko y Repkin (BLR). Expulsaron con tarjeta roja directa al jugador de Eslovenia Vid Kavticnik (m.60) y por tres exclusiones al jugador español Gedeón Guardiola (m.60)
Además excluyeron por dos minutos a Bombac, Marguc y Miklavcic por Eslovenia; y a Víctor Tomás por España.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la segunda jornada del grupo C del Europeo de Polonia disputado en el Centennial Hall de Breslavia ante unos 4.500 espectadores.
De hecho, la selección española tan sólo se puso una vez por delante en el marcador (18-19), todo un síntoma de los problemas de los de Manolo Cadenas, que al menos, tuvieron el oficio para rescatar un empate, que podría servirles para lograr la clasificación para la segunda ronda si Suecia vence esta tarde a Alemania.
Cábalas en las que debe refugiarse un equipo español, que nunca se encontró a gusto ante una defensa eslovena, que desde los primeros minutos de juego se le atragantó a los "hispanos", carentes de la paciencia necesaria para adaptarse a los constantemente cambios de dibujo de la zaga balcánica.
Y es que España ni tuvo la paciencia, ni dotó de continuidad a su ataque estático, incurriendo en continuos errores de tiro y de pase, que condenaron a los "hispanos" a situarse, apenas transcurridos once minutos, con una más que inquietante desventaja de cuatro goles (6-2) en el marcador.
Un tanteador que obligó a Manolo Cadenas, que apostó de inicio por la presencia de Niko Mindegia y Juan del Arco en la primera línea, a cambiar sus planes y encomendar el timón del equipo al más experimentado Raúl Entrerríos.
Con la presencia del central del Barcelona mejoró en algo la circulación de balón del conjunto español, aunque le siguió costando un mundo conectar con los extremos y pivotes, algo fundamental para superar a una defensa como la eslovena, que deja innumerables espacios.
Sin acierto en ataque, España quedó a expensas de su defensa, que al igual que ocurrió en el debut en el Europeo ante Alemania careció de la intensidad y, sobre todo, de la anticipación necesaria, para propiciar la salida al contragolpe.
Todo un problema para la selección española ante el cada vez mayor atasco ofensivo de España, que sumaba tan sólo ocho goles (12-8) tras veinticinco minutos de juego.
Lo único positivo en el juego de los "hispanos fue la tranquilidad que los internacionales españoles destilaron en todo momento pese al preocupante marcador, lo que hacía albergar la esperanza de una mejoría en una segunda mitad que España encaró con una desventaja de tres goles (13-10) en el tanteador.
Una mejoría que no llegó ni con el equipo de "gala", incapaz el equipo español de dotar del más mínimo ritmo a su ataque, lo que permitió a Eslovenia cerrar todos los caminos hacia el pivote Julen Aginagalde, la única vía efectiva para llegar al gol.
Pero España no se rindió, y con enormes sufrimiento fue poco a poco, amparado en una cada vez más entonada defensa y, sobre todo, en la oportunas paradas de Gonzalo Pérez de Vargas, limando las diferencias hasta igualar la contienda (17-17) a los cuarenta y tres minutos.
Una remontada en la que jugó un papel fundamental el lateral Antonio García, que tras forzar dos penaltis consecutivos, puso por primera vez a el conjunto español por delante en el marcador (18-19) con un gol, todo coraje, a trece minutos para la conclusión.
Pero una inoportuna exclusión de Gedeón Guardiola acabó la dinámica positiva del conjunto español, que se vio abocado a tener que lidiar de nuevo con un marcador adverso (23-21) a poco más de cinco minutos para el final del duelo.
Tiempo en el que pese a la irrupción de Joan Cañellas, autor de un gol y una magnífica asistencia a Julen Aginagalde, llegó al último minuto por detrás en el marcador (24-23) y sin la posesión de balón.
Una delicada situación que España solventó con un espectacular blocaje de Gedeón Guardiola, que propició el contraataque que permitió a Cristian Ugalde establecer el definitivo empate (24-24) en el tanteador.
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