Luis Enrique: “Nuestra profesión es de riesgo, como el ‘puenting”
El entrenador del Barcelona afirma que no le sorprende la destitución de Benítez y asegura que sus jugadores están con “una motivación excelente” para el derbi
El episodio dos de la trilogía de derbis, entre el Barcelona y el Espanyol, se dará cita mañana en el Camp Nou (20.30h.). Esta vez el duelo será por la ida de los octavos de final de la Copa del Rey. “Después de analizar el partido y verlo con profundidad, creo que hicimos un muy buen encuentro”, se arrancó Luis Enrique, sobre el último partido de Liga en Cornellà. “Generamos seis o siete oportunidades de gol muy claras, a pesar de que el rival hizo un partido defensivo muy bueno. Aunque esto no significa que no haya cosas que mejorar. Esperamos poder ser capaces de dar un buen regalo a nuestros aficionados para el Día de Reyes”, añadió el asturiano; “los jugadores están con unas ganas tremendas de jugar mañana, están con una motivación excelente”.
El último clásico de Barcelona dejó secuelas: supuestos gritos racistas de la afición blanquiazul contra Neymar y desde el entorno azulgrana se juzgó de violenta la actitud de los muchachos de Galca en Cornellà. “No quiero valorar ese tipo de cosas. No las valoré en caliente, me callé y no voy a hablar ahora”, resolvió Luis Enrique. Y Galca, por su parte, valoró: “En el campo no vi nada, solo vi un partido con mucha intensidad. Hablamos del mejor equipo del mundo y seguramente por el orgullo de los jugadores del Barça, con seguridad, van a querer ganar el partido”. Y volvió el técnico del Barça: “Veremos un partido muy diferente del de Cornellà”.
En el Madrid hubo cambió en el banquillo, pero a Luis Enrique este tipo de situaciones no le asombran. “La nuestra es una profesión de riesgo, como el puenting. Es desagradable cuando nos afecta y agradable cuando eres el nuevo. Cuando hacemos el curso, lo primero que nos dicen es: ‘Que sepáis que los van a despedir alguna vez’. La cadena siempre se rompe por el eslabón más corto”, dijo el preparador azulgrana.
El técnico del Barcelona afirmó no tener opinión de Zidane como entrenador y prefirió obviar el altercado que tuvo cuando era jugador azulgrana con el francés. En un clásico en 2003, Zizou sacó a relucir todo su mal genio y le estampó un manotazo en la cara a Luis Enrique. “No veo informativos y no recuerdo la jugada. Seguro que hubo el respeto mutuo que nos tenemos todos los profesionales en el campo”, zanjó Luis Enrique.
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