Primer tren con destino Francia

Entre el jueves y el martes quedará configurado casi todo el cuadro de participantes para la primera Eurocopa que albergará 24 selecciones. Cinco selecciones ya tienen billete (Austria, República Checa, Inglaterra, Islandia y la anfitriona Francia) y 32 más la buscan en las dos últimas jornadas de la fase de clasificación. Pasan las dos primeras de cada grupo y entre las que queden terceras, la mejor se clasifica y las ocho restantes jugarán una repesca en noviembre para dilucidar las cuatro últimas plazas.

Dos grandes en apuros. O Turquía u Holanda se quedarán fuera de la gran cita del próximo mes de junio, superadas en el grupo A por islandeses y checos se juegan una plaza en la repesca. La ventaja es para la selección que dirige Fatih Terim, que la aseguraría con sumar cuatro puntos ante las dos selecciones ya clasificadas. “Tienen dos partidos muy difíciles y seguro que tendremos una oportunidad”, razona Van Persie, delantero holandés del Fenerbahçe.

Bale no quiere perderse la cita con la historia. Gales tiene dos oportunidades para sumar el punto que le daría el pase a su primera Eurocopa, el sábado en Bosnia, que tiene la duda de Dzeko, o el martes en Cardiff frente a Andorra. Bale dice que está disponible para jugar dos partidos en tres días. Lo lógico es que, en el peor de sus escenarios, Gales supere a Andorra y esté en Francia y Bélgica haga idéntico camino antes. Israel será tercera si suma cuatro puntos entre su visita final a Bruselas y su cita en casa ante Chipre.

En el grupo de España puede haber tres pases. Un triunfo ante Luxemburgo califica a la selección, que no se pierde una gran cita futbolística desde 1992. Eslovaquia, que jugará también como local, le acompañará si supera a Bielorrusia. Y aún le quedaría una última bala frente a Luxemburgo. Pero Ucrania, con el tercer puesto asegurado, no debe dejarse llevar porque si gana sus dos partidos tendrá serias opciones de clasificarse como mejor tercera (en los grupos de seis equipos se descuentan los dos resultados contra el colista). Visitan a Macedonia y acaban en Kiev contra España. Tienen aversión a la repesca: jugaron cinco y las perdieron todas.

Alemania y Polonia, muy cerca. A los germanos le basta un empate esta noche en Dublín para sentenciar, pero una derrota le abocaría a ganar en Leipzig a Georgia en la última jornada. Irlanda agotará sus opciones ante sus rivales directos, primero contra Alemania y luego en Polonia, que buscará antes un triunfo en Escocia ante un rival al que sólo le vale ganar para soñar con ser tercero. Todos los focos apuntan a Lewandowski y su feroz racha goleadora.

Asequible para los suizos. Inglaterra, ya clasificada, hará de juez para decantar las escasas posibilidades que tiene Estonia de llegar a la tercera plaza del grupo E. La batalla por la segunda está entre Suiza y Eslovenia, con ventaja para los helvéticos, que superan en tres puntos a sus rivales y reciben a San Marino antes de viajar a Estonia. “Tenemos que ganar a Lituania y San Marino, si después tenemos alguna sorpresa lo celebraremos”, apunta el capitán esloveno Bostjan Cesar.

El regreso de Irlanda del Norte. El grupo de menor nivel es el más igualado. Irlanda del Norte, que nunca jugó una Eurocopa y no acude a un Mundial desde 1986, llegará al éxito si suma tres puntos esta noche ante Grecia en Belfast o en su visita a Helsinki el domingo. El otro pasaporte estaría virtualmente en manos de Rumania si supera hoy en Bucarest a Finlandia. Hungría aseguraría la repesca ganando en Islas Feroe, donde cayeron los griegos, colistas y gran fiasco.

Problemas para Ibrahimovic. Austria está clasificada tras ceder apenas un empate en ocho partidos y Rusia, Suecia y Montenegro están en la pelea. A los balcánicos les daña el 0-3 administrativo después de que una bengala lanzada por sus seguidores golpease al portero ruso Akinfeev en un partido que empataban. Tienen complicadas opciones, pero pueden chafar a los rusos en la última jornada en beneficio de una errática Suecia, que cierra con dos citas asequibles ante Lietchenstein y Moldavia. Con todo, si Rusia gana a los moldavos y empata con Montenegro, Ibrahimovic acabará en la repesca.

El pasaporte de Italia está en casa de Prosinecki. Los trasalpinos se clasifican si ganan en Azerbaiyán, que no cae desde que la entrena Prosinecki y recibe en un terreno donde Croacia empató y Noruega venció con dificultades. Un tropiezo llevaría al equipo de Conte a un final ante los nórdicos en Roma que podría enviarle a la respesca si el grupo culmina con un triple empate en cabeza. Croacia es ahora tercera, pero si gana sus dos partidos a Bulgaria y Malta tiene serias opciones de clasificarse.

Alto riesgo en Albania. Portugal recibe hoy en Braga a Dinamarca y si empata no sólo se habrá clasificado sino que habrá abierto las opciones para que Albania, rival de España en el camino para el próximo Mundial, le acompañe. A la sorprendente selección que adiestra el italiano Di Biasi le bastaría con un triunfo en los dos partidos que le quedan, el primero de ellos de alto riesgo porque recibe esta noche a Serbia en la remota Elbasan entre fuertes medidas de seguridad que incluyen francotiradores en los edificios que rodean el estadio que acoge el partido. Si Albania no gana a Serbia los portugueses estarán clasificados.