Frente a Barcelona y Real Madrid, modelo Joventut
“Los grandes distorsionan la competición”, mantiene Salva Maldonado, que propugna un estilo espectacular que enganche
Albert Sàbat accede a la cancha del pabellón olímpico de Badalona. Se forma una cola para entrevistarle. Es uno de los fichajes importantes de la Penya, un base de 30 años que había llamado a la puerta de la Liga Endesa hasta en cuatro ocasiones sin que se le abrieran debido a los vericuetos burocráticos y económicos que impidieron los ascensos conseguidos por el Alicante y el Burgos. Sàbat es un tipo de jugador que ni pintado para explicar la filosofía del Fiact Joventut. Es una apuesta realista, de un jugador del que se espera que complemente su experiencia con la juventud de una plantilla en la que repiten los productos de la factoría verdinegra, Abalde, Ventura, Llovet y otros que regresaron al redil hace un tiempo como Sergi Vidal o Miralles. Falta este año Àlex Suárez. La última perla —llegó a Badalona en 2009 procedente de la Escuela de Tecnificación Balear—, se la llevó el Real Madrid, que pagó unos 300.000 euros, para cederla al Bilbao.
“Se van cada jugadores vez más jóvenes y el retorno económico es cada vez menor”, constató el presidente del Joventut, Jordi Villacampa, al tiempo que apelaba a la idiosincrasia del club: “Somos la Penya, un club de formación. Y queremos salvar el modelo. La afición es consciente de lo que somos, se ha portado muy bien y la pasada temporada vino a divertirse y a disfrutar”. El equipo entonces obró “un pequeño milagro”, en palabras de su presidente. Estuvo entre los ocho mejores que disputaron la Copa y acabó la Liga Endesa en la séptima plaza, tras ganar al Barcelona en el Palau y poner en jaque al Madrid en sus dos enfrentamientos.
Se van cada jugadores vez más jóvenes y el retorno económico es cada vez menor. Lo de la temporada pasada fue un milagro” Jordi Villacampa
La Penya tuvo que renunciar a disputar la próxima edición de la Eurocopa debido a las dificultades económicas por las que atraviesa. Esta temporada su presupuesto es de cuatro millones, la mitad de hace cuatro años. La entidad debe cumplir con el plan de viabilidad impuesto desde que hace tres años dejó de estar en concurso de acreedores por una deuda entonces cifrada en 14 millones. El club se siente agraviado porque la mayoría de sus rivales se financian a través de subvenciones directas de la administración, de entidades bancarias o de clubes de fútbol.
“Vamos a mantener una filosofía parecida a la del año pasado”, mantiene el entrenador Salva Maldonado. “No hemos cambiado mucho, hemos hecho algunos retoques (además de Sàbat han llegado el pívot guineano Ousmane Drame y el alero estadounidense Brandon Paul), pero intentaremos practicar un baloncesto espectacular y competitivo, y enganchar a la afición”. Maldonado, que aseguró haber asimilado ya la frustración por no poder competir en la Eurocopa, se refirió a la tremenda desigualdad de la Liga Endesa.
“El Barcelona y el Madrid distorsionan la competición. Están en otro estatus. Debilitan al resto de equipos, fichando jugadores y cediéndolos a clubes de la propia Liga. No lo hacen de forma voluntaria, pero es una realidad”. La Liga, según Maldonado, ha empeorado. “Pierde jugadores que acaban liderando las clasificaciones individuales y se van a otras ligas que igual no tienen mejor nivel pero sí mayor potencial económico. Antes no había ligas mejores que la nuestra”. Un ejemplo de la pérdida de competitividad, dice, está en el gran número de jugadores sin experiencia que llegan a los equipos durante las últimas temporadas.
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