Tissone hunde al Málaga

El Málaga ha caído en desgracia. Le cuesta generar fútbol y apenas dispone de ocasiones. No tiene gol. Sus remates y disparos no encuentran los tres palos ajenos. Marcó Tissone y lo hizo inesperadamente en su propia portería, tras una falta botada por Denis Suárez que cabeceó hacia Kameni, que no pudo hacer nada ante el imparable testarazo amigo. La actitud y el orgullo ante la adversidad no le fueron suficientes al conjunto de Javi Gracia para revertir una situación preocupante, seco en ataque en las cinco jornadas que se llevan disputadas. Lo agradeció el Villarreal, que en su versión descafeinada logró un nuevo triunfo buscado durante gran parte del partido y que lo encontró con la pifia de Tissone.

Con amplitud de plantilla, refrescó Marcelino la alineación con hasta siete cambios respecto al choque ante el Athletic. Ausentes Soldado y Bakambu por lesión, el técnico del Villarreal, para quien resulta innegociable formar con dos delanteros, pronto debió de prescindir de uno de ellos. A los nueve minutos abandonó el terreno de juego Adrián López por problemas musculares, teniendo que ser sustituido por Nahuel, un centrocampista, quedando Leo Baptistao como único punta amarillo, al que la carga de partidos en este inicio de temporada está haciendo mella física en el ataque.

El Málaga no estaba para contemplaciones, dispuesto a conseguir la primera victoria de la temporada ante un Villarreal que, con la presión avanzada, se propuso no dejar de llevar la iniciativa al conjunto de la Costa del Sol, lo que derivó en un exceso de celo en el centro del campo, sin precisión ni picante por parte de ambos equipos, faltos de tacto, con demasiadas prisas por llegar al área contraria. Hasta pasada la media hora, no llegó la primera ocasión del partido. Y esta fue para el Villarreal, tras una gran dejada de Samuel García, que volvía a La Rosaleda —Samu Castillejo se quedó en el banquillo—, a Nahuel cuyo precioso recorte a Angelieri no terminó en gol por una gran parada de Kameni, como tantas veces salvador del Málaga.

Que al conjunto malacitano le falta gol es una evidencia. Patente quedó tras un centro combado de Duda de derecha a izquierda que dejó el esférico a los pies de Horta que, en disposición de marcar, remató mordido y desviado sin encontrar portería. Se animaba el choque. Y Baptistao tuvo el gol en su pie derecho en dos ocasiones. En la primera su disparó fue a parar al exterior de la red; en el segundo, Kameni despejó como pudo el tiro del delantero brasileño. A través del esférico, y con más pausa y presencia de Jonathan dos Santos y Denis Suárez, creció el Villarreal en la medida que el Málaga se acomplejó con los ataques amarillos.

Continuó la dinámica en el segundo acto, con las ideas más claras el Villarreal, confuso el Málaga en ataque, con problemas en defensa. Al conjunto castellonense le faltaba puntería, acaparada por Baptistao, que no aprovechó dos situaciones favorables. Encontró el gol gracias a Tissone, el centrocampista argentino del conjunto malacitano que equivocó el remate. Marcó en su portería para desgracia del Málaga que sigue yermo. A la inversa que el Villarreal, que no pierde la estela del líder Madrid.