Llull y el Madrid de los imposibles
El triple del menorquín ante el Valencia certificó la enésima remontada de los blancos este curso y colocó un 2-1 en la eliminatoria que nadie ha remontado en la historia de la ACB
Dribló a Nedovic y se elevó sobre el parquet de La Fonteta para protagonizar otra de sus hazañas. Faltaban 4,7 segundos para el final de la prórroga cuando Sergio Llull rescató al Madrid en Valencia con un triple de videoteca. Con el defensor colgado de su muñeca derecha articuló otro lanzamiento ejecutor que resolvió un partido histórico. Hacía 21 años que no se veían tantos puntos en un duelo de la penúltima ronda por el título: 203 puntos entre ambos equipos repartidos en un 100-103 que deja al conjunto de Laso a un paso de la final.
Una eliminatoria brava que en su tercer episodio acumuló hasta 62 faltas y 72 viajes a la línea de tiros libres. Un duelo de pistoleros en el que se vivió la enésima remontada del Madrid en lo que va de temporada. Los blancos llegaron a ir perdiendo por 10 puntos a falta de siete minutos para el final de los 40 reglamentarios (76-66, m. 33). Pero en la frontera de las hazañas apareció el señor de los imposibles: Sergio Llull selló un 2-1 que nadie ha remontado según cuenta la enciclopedia de la ACB. Hasta la fecha, ha habido un total de 22 precedentes con ese marcador parcial en la serie y en todos ellos acabó clasificándose para la final el equipo que partía con la ventaja de campo. La mitad de las eliminatorias se resolvieron en el cuarto partido y la otra mitad en el quinto. Para agarrarse a la cornisa, Laso recurrió a una defensa en zona que secó al Valencia. Los naranjas solo pudieron anotar tres canastas en juego en el último cuarto hasta que los blancos completaron la caza y captura.
“En el cara o cruz hemos ganado nosotros pero lo más importante es que en ningún momento hemos dejado de creer”, señaló Pablo Laso tras el partido. “A pesar de las bajas, hemos competido hasta el último segundo contra el mejor equipo de Europa. Ha sido un partido espectacular. Lo hemos tenido ahí hasta que Sergio Llull ha metido un canastón de jugón”, resumió Carles Duran tras ver como el Madrid sellaba otro volantazo inverosímil.
Este curso, la trayectoria del Madrid de Laso ha estado marcada por las remontadas a golpe de carácter. Desde la segunda jornada de la primera fase ante el Unics, cuando levantaron cinco puntos de desventaja en el último minuto hasta la exhibición de furia ante el Efes en el playoff de cuartos de la Euroliga. Para la colección, arrebatos como el de Kaunas cuando los blancos doblegaron al Zalgiris neutralizando nueve puntos de desventaja en los últimos tres minutos o parciales como el 7-29 ante el Dinamo de Sassari y el 20-5 también ante el Efes. Después llegaron las remontadas ante el CAI y el Joventut en la Copa (con parciales de 30-15 y 26-8 en los terceros cuartos) o alardes de funambulismo en la Liga Endesa ante el Joventut (levantando nueve puntos en los últimos seis minutos en la primera vuelta y siete en los últimos cinco en la segunda), Baskonia (con un triunfo sobre la bocina con un 2+1 de Llull tras ir 11 abajo) y Gran Canaria (con un parcial de 13-33 y 60 puntos en la segunda mitad tras ir 15 abajo). La eliminatoria ante el Efes certificó esa capacidad de reacción. En el primer partido, con un parcial de 32-13 en 12 minutos y 26-10 en el último cuarto para levantar 11 de desventaja. En el segundo, con 45 puntos en los últimos 13 minutos y dos parciales de 23-5 y 15-3 para un vuelco histórico levantando 17 puntos de desventaja a falta de 13 minutos y otros siete en los últimos dos. Irregular en ocasiones, pasional siempre, así es el Madrid que puede certificar el pase a su cuarta final consecutiva de la Liga Endesa.
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