El embrollo Alves
La renovación del lateral del Barcelona sigue estancada a pesar de su papel capital en la defensa
Desde hace un curso está más que revuelta la situación de Dani Alves con la directiva azulgrana. Todo empezó la pasada pretemporada, cuando el presidente Josep Maria Bartomeu solicitó al área deportiva ya destituida que lo traspasaran —también a Xavi— porque entendía que no sería rentable económicamente para el club y que era posible encontrar recambios. Andoni Zubizarreta, entonces director deportivo, se negó porque no había futbolistas que se ajustaran al precio ni fueran a aportar más. Eso no impidió preguntar por Cuadrado (Chelsea) y Valencia (Manchester United) —a los que se pretendía reconvertir de extremos a laterales—, aunque después se descartaran debido a la gran inversión que supuso la llegada de Luis Suárez (81 millones de euros)[80 MILLONES]. Ocurrió que la sanción de la FIFA por el traspaso irregular de menores se hizo evidente y entonces entraron las prisas por incorporar a un nuevo lateral derecho. Y se trajo a Douglas por cuatro millones. Pasado el tiempo, el Barça y la representante del jugador, su exmujer, Dinorah Santana, siguen a la gresca y sin entenderse mientras el futbolista hace lo que siempre hizo: jugar.
Alves expresó cómo siente su profesión a través de las redes sociales, justo el día después de darle una patada a un botellín de agua junto al banquillo tras ser sustituido frente al Manchester City. “No sé cuánto durará mi relación con este club, pero mientras forme parte de él, los míos estarán muy orgullosos de mi dedicación, de mi entrega, y de mi forma de entender cómo se deben encarar los sueños y transformarlos en realidad. Que siga el baile, las broncas, los aciertos, los abucheos, los aplausos, los errores, los amores y la pasión porque al final, sin eso, ¿qué sería de esta profesión?”, escribió. “Dani es un profesional como la copa de un pino”, explica Bartra. “Le gusta mucho estar de broma, es verdad, pero cuanto toca trabajar siempre da ejemplo”, añade Piqué. “Y lo que da a este equipo pocos futbolistas podrán igualarlo”, remata Xavi.
De no saber nada de su representante, el club la llamará para retomar las negociaciones
Con la sanción FIFA vigente y sin otro lateral derecho que funcione [Montoya pidió marcharse en diciembre a la Juve, que finalmente lo descartó por su elevado salario; y Douglas apenas ha contado para Luis Enrique], el Barça le hizo a Alves su oferta de renovación en marzo. Demasiado tarde para el brasileño, molesto y considerando jugar en otro lado —tiene, según su entorno, más de tres propuestas con contratos de tres temporadas—, por más que su prioridad siga siendo el Barcelona. “El Barça nos ofreció un año, más uno y más otro en función de los partidos jugados”, explicó Dinorah, que días después dio una rueda de prensa amenazando con romper las negociaciones. Se habló del PSG, cuyo interés manifestó públicamente Laurent Blanc, su entrenador. Se sabe, sin embargo, que el Manchester United le sigue desde hace un par de años, interesado el conjunto inglés en reforzar la zaga. “Y ahora”, prosigue Dinorah; “todo sigue igual. Es la misma oferta. Si es la definitiva no la vamos a aceptar y esto se habrá acabado. El jugador esperaba más del club”.
Ya veis la confianza que tengo en Alves a la hora de hacer las alineaciones” Luis Enrique
Desde el Barcelona, en cualquier caso, no lo interpretan así. “Estamos esperando a que nos den una respuesta. La oferta que les hemos hecho es de dos años más la opción de un tercero en función de partidos”, señalan desde el club. El tercer año no es, sin embargo, por número de partidos sino por porcentaje. Para llegar a ese tercer año —que es la gran pretensión del jugador porque la oferta en lo económico es más o menos la misma—, Alves debería jugar el 60% de los encuentros del segundo. De seguir como hasta ahora no le debería preocupar demasiado porque lo juega casi todo. “Ya veis la confianza que tengo en Alves con las decisiones que tomo a la hora de hacer las alineaciones”, expuso Luis Enrique, a quien le gusta hacer rotaciones pero que se decante por él en los duelos capitales. El ex del Sevilla ha jugado el 69% de los partidos (39 de 56) de esta temporada, la vez que menos desde que llegó al Barça dada su progresión: 87%, 79%, 87%, 81%, 79% y el año pasado, 70%.
Alves no ha marcado gol alguno en este curso y suma siete asistencias, dos más que el año pasado, pero está lejos de los números que registró en sus primeros cuatro ejercicios: 12, 13, 17 y 16. “Dani tiene un nivel profesional altísimo y quizá es el mejor lateral derecho de la historia del Barcelona. Su renovación es una decisión que debe tomar la gente del club”, reivindica Luis Enrique. Por eso, si el Barça no sabe nada de la representante la llamará en breves para retomar las negociaciones. Y Alves seguirá jugando. No se sabe si hoy ante el Córdoba, pero a buen seguro en las semifinales de la Champions y la final copera.
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