Hezonja, un triplista en la oficina

Mario Hezonja la lio otra vez, con un alarde que deja huella: ocho triples lanzó y ocho triples anotó. El alero croata firmó la noticia en un partido que, de otra forma, se hubiera sumado al feo inventario de las soberanas palizas que se producen en la Liga ACB ya que su equipo, el Barcelona, arrolló por 101-53 a un Bruixa D'Or Manresa que solo anotó 13 puntos en la primera parte. Pero el alero del Barcelona no deja pasar ocasión para reivindicarse. No estaban Navarro ni Oleson, lesionados, ni Abrines, griposo. Y Hezonja decidió afinar la mirilla desde más allá de la línea de 6,75 metros. Anotó el primer triple en el segundo cuarto y dejó los otros siete para la segunda parte. Concluyó su magna actuación con 24 puntos, seis asistencias y dos robos de balón.

El jugador nacido en Dubrovnik (Croacia), la misma ciudad natal de su compañero Tomic, iguala el registro de cuatro afamados cañoneros en la historia de la competición, con la diferencia de que la línea de triples está medio metro más alejada desde la temporada 2010-2011. Los 8 de 8 anteriores, cuando la línea estaba en los 6,25 metros, los obtuvieron el brasileño Oscar Schmidt (Valladolid, 1994), los serbios Sasha Djordjevic (Barcelona, 1998) e Igor Rakocevic (Baskonia, 2007) y el estadounidense Taquan Dean (Murcia, 2009).

El día 25, Supermario, como le apodan, cumple 20 años. En su vida, todo va deprisa. Debutó como profesional en Croacia con solo 13 años. En 2011, con la selección croata, ganó el Europeo Sub 16 y la medalla de bronce en el Mundial Sub 19. Llegó al Barcelona en 2012, tras rechazar, entre otras, una oferta de la Universidad de Kentucky. “Tenía 16 años cuando llegué a Barcelona. Siempre dicen que lo más difícil es pasar de junior a profesional. Para mí, no hay diferencias entre una categoría y otra. Para mí, lo más difícil fue cuando llegué a otro país, con otro idioma, otra cultura, otra manera de hacer. Los dos primeros años mi trabajo se centró en lo psicológico. Afortunadamente, Xavi Pascual siempre cuida de mí. Ahora, debo mejorar mi juego, en todos los aspectos, en cada detalle”, relató Hezonja en Esport 3 tras su exhibición ante el Manresa.

El entrenador del Barcelona le dio la alternativa en el primer equipo el 30 de octubre de 2012 en un partido de la Euroliga ante el Besiktas. El 7 de abril debutó en la Liga Endesa, ante el Obradoiro. En octubre de ese mismo año, con ocho puntos y 11 rebotes en otro encuentro ante el Manresa, se convirtió en el tercer jugador en la historia del Barcelona que, con 18 años, llega a los 15 puntos de valoración estadística. Los anteriores habían sido Galilea y Navarro.

Para mí, lo más difícil fue cuando llegué a otro país, con otro idioma, otra cultura...”

Mario Hezonja

Desde entonces su trayectoria se ha visto salpicada por jugadas espectaculares y algunos errores de bulto que varias veces le han devuelto al banquillo de manera fulminante. “Xavi siempre quiere que estemos al 100% y por eso, a veces, me grita. Pero a mí me gusta. Es como un padre y un hijo. Quiere que mejore en cada aspecto del juego. No sólo en el baloncesto, sino también en la vida. Sabe dónde estoy en cada momento y siempre está ahí cuando necesito algo. Soy el jugador que más veces he estado en su oficina”, cuenta el jugador que porta, precisamente, el número 8 azulgrana. Varias páginas web especializadas lo sitúan entre los 10 primeros para el draft de la NBA en 2015, aunque antes debería declararse elegible puesto que, por edad, todavía no lo es. “No me importa. No pienso en ello. Solo pienso en el Barça”, sentencia Supermario.