La penúltima bronca de Osvaldo

Roberto Mancini lleva menos de dos meses en el Inter y ya se ha hartado de Osvaldo. El club le ha impuesto una multa y el técnico –que está dispuesto a venderlo en el mercado de invierno.- le está haciendo entrenar aparte después de la bronca que tuvo con Icardi el martes en el estadio de la Juve. El pequeño no le pasó la pelota al mayor en un contragolpe y a Osvaldo se le cruzaron los cables. Fue directo a por su compañero de equipo. Solo la intervención de Guarín evitó que llegaran a las manos. En los cinco minutos que Osvaldo disputó contra la Juve le dio tiempo a enzarzarse con Icardi –la bronca prosiguió en el vestuario- y a enviar a tomar por saco a Mancini.

El técnico le regañó por no bajar a defender en esa jugada –se quedó protestándole a su compañero- y Kovacic, para intentar tapar el hueco dejado descubierto por Osvaldo hizo una falta por la que vio la roja. Aparte del insulto, el argentino naturalizado italiano le espetó a Mancini: ‘¡por qué no le dices nada a Icardi que no sabe jugar!’. Multa aparte, el técnico probablemente lo castigue también dejándole fuera de la convocatoria para el partido del domingo contra el Génova. El club, además, le busca una salida.

En el Espanyol todavía recuerdan verle fumar a escondidas

No es la primera vez que Osvaldo, 28 años, es multado por el club por enfrentarse a sus compañeros. En la Roma le pegó un puñetazo a Lamela en el vestuario. Fue su forma de recriminarle que no le había pasado la pelota. En el Southampton, el año pasado, le rompió la nariz de un cabezazo a otro compañero, el defensa portugués José Fonte.

En la Roma le pegó un puñetazo a Lamela y en el Southampton le rompió la nariz a José  Fonte

Cesare Prandelli, exseleccionador de Italia, aplicó con él el código ético en varias ocasiones. Una de ellas, tras publicar un tuit polémico contra el árbitro del Lazio-Roma en una final de Copa. “Habrías hecho menos el ridículo de admitir que eres un incapaz. Vete a celebrar la victoria con los de la Lazio”, escribió. La Roma se deshizo de él tras dos temporadas y después que la relación con Totti se desgastara (en un Sampdoria-Roma le robó un penalti y lo falló).

 A la capital de Italia había llegado procedente del Espanyol después de que Pochettino, también, se hartara de su comportamiento. Osvaldo no se presentó a la pretemporada de 2011. Nadie conseguía localizarle. En el club catalán todavía recuerdan verle fumar a escondidas antes de ducharse después de los entrenamientos, también sus incursiones en Plaza Cataluña donde se le veía tocar la guitarra. En los últimos diez años ha cambiado diez equipos. El Inter ha sido el último. La bronca puede que solo sea la penúltima.