Messi y la ecuación del 9

La insaciable sed de gol de Messi ya no es incompatible con un 9 clásico. Igualado el récord de Raúl como máximo artillero de la Liga de Campeones (71 goles), y a punto de pescar a Zarra como el mejor goleador de la Liga (lleva 250 por 251), el crack argentino se vuelve a reinventar. Esta vez como enganche y con un ariete por delante de él en el césped. Atrás quedó la época en la que animales del área como Eto’o o Ibrahimovic, u otros con menos pedigrí como Bojan o Gudjohnsen, dejaban el Camp Nou por falta de sintonía con la Pulga. Ahora, con Luis Suárez, el 10 juega de 10.

El pasado miércoles, en Ámsterdam, Luis Enrique dibujó el clásico 4-3-3 con Messi de falso 9 y Luis Suárez recostado sobre la orilla derecha. El Barça no encontraba el rumbo. Entonces, el preparador azulgrana agitó la pizarra: el uruguayo, en punta, y el argentino, por detrás y con libertad. “Tenemos un perfil de jugadores que se adaptan a diferentes posiciones y cuando vemos que tenemos alguna dificultad podemos utilizar estas variantes”, explicó el asturiano; “Leo puede aparecer como interior o en banda y la única cosa que tenemos que hacer es compensarlo”.

No es la primera vez que el 10 apuesta por un 9 de área. “Con una referencia en el área como Villa, no salían los centrales y eso me dejaba más espacios”, explicaba Messi en febrero de 2013, con Tito Vilanova en el banquillo. En la albiceleste no tiene dudas. “Me gusta cuando juego con dos delanteros y yo por detrás”, explicó Messi sobre su sociedad en ataque junto a Higuaín y Agüero antes de la Copa del Mundo en Brasil. Ahora, con Martino al mando de la selección argentina, se repetirá la formula, ya sea con el repatriado Tévez o Higuaín, y siempre junto Agüero.

Estamos contentos de que Luis esté con nosotros. De a poquito se va a ir adaptando a la filosofía del Barcelona” Lionel Messi

Messi quería un ariete en el Barcelona. “Me encantaría que se dé. Es uno de los mejores delanteros del mundo y a nosotros nos vendría muy bien”, dijo La Pulga en la Copa del Mundo, cuando se rumoreaba con el posible aterrizaje de Higuaín en Barcelona. No llegó su paisano pero a cambio el Barcelona fichó a Luis Suárez. “Las culturas de Argentina y Uruguay son parecidas. El mate, juntarse por la tarde con las familias. Eso es bueno y te da respaldo. No es porque sea Leo, si no porque es sudamericano y nos juntamos muchos”, explicó el charrúa a Rac1. Su buen feeling con Messi fuera del campo es el mejor gol que podía marcar el uruguayo, todavía sin estrenarse con el Barça. “Estamos contentos de que Luis esté con nosotros. De a poquito se va a ir adaptando a la filosofía del Barcelona. Esperamos mucho de él”, concluyó el argentino.

Con Suárez como ariete, Neymar pierde protagonismo. Hasta ahora el brasileño sumaba una media de pases de 0,45 por minuto jugado, mientras que en duelo frente al Ajax apenas rozó el 0,30. Su sociedad con Messi era de las pocas buenas novedades del curso. Una ecuación más que Luis Enrique deberá descifrar.