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Simeone regresa a su hábitat para interactuar

Tras cumplir cinco partidos de sanción, el técnico regresa al banquillo ante el Sevilla

Ladislao J. Moñino
Simeone, durante el último entrenamiento
Simeone, durante el último entrenamiento JuanJo Martin (EFE)

Sobre las cristaleras del palco desde el que Diego Pablo Simeone contempló el Almería-Atlético delataron la sudoración estresante del técnico. Cada vez que el técnico se inquietaba por lo que veía, las palmas de sus manos dejaban grabadas sus siluetas en los cristales. El de los Juegos Mediterráneos fue el último de los cinco partidos que el técnico rojiblanco se ha visto obligado, por sanción, a presenciar lejos del banquillo. No se ha sentido cómodo Simeone en esas ubicaciones tan clásicas en los entrenadores ingleses, pese a reconocer que la visión desde esa atalaya le permitía un análisis más certero de lo que sucedía. Desde la pasión que siente por el juego y desde la que lo vive como jugador es un entrenador que necesita interactuar con sus futbolistas durante los partidos. Sus quehaceres a pie de campo tienen que ver con todo lo que sucede en el juego. Ordena al portero si debe sacar en largo o en corto, recoloca a los defensas, azuza con sus gritos la presión y sus jugadores le buscan para elegir la estrategia a seguir en las jugadas a balón parado. Suele decir Simeone que al final son los futbolistas los que deciden, pero también se encarga él muy mucho de que se ejecute lo que decide antes y durante los encuentros. En Atenas reconoció sentir impotencia por no poder corregir con inmediatez lo que apreciaba desde el palco.

Su reaparición en el banquillo se produce una semana después de que por primera vez como entrenador del Atlético escuchara a la grada reprobarle una decisión táctica. Sentar a Griezmann y dejar en el campo a Raúl Jiménez ante el Celta agitó a la hinchada que, contrariada, le reprochó la decisión de retirar al mejor jugador del partido y mantener al que esperaba que sería sustituido. Los silbidos generaron malestar en su asesor de prensa Pepe Pasqués que en las redes sociales lanzó mensajes que no han gustado en el club, principalmente en el que decía “no confundan la presa”. Se interpreta en los despachos que estaba señalando al club o a los jugadores, además de percibir ese “ojo chicos a quién pitan”, como una amenaza velada de una futura marcha del club.

Desde la llegada de Emery se hicieron más competitivos"

Con todo, el Atlético celebra hoy ante el Sevilla el día de las peñas y Simeone será de nuevo entronizado por una hinchada que le sigue a ciegas pese a que mostrara esa puntual disconformidad. Desde las redes se ha instado a los seguidores atléticos que se institucionalice el “ole, ole, ole, Cholo Simeone”, coincidiendo con el minuto 14, en homenaje al dorsal que lucía como jugador. “Deseo un estadio entregado con sus jugadores, una afición, como siempre, respondiendo a un partido importante para nosotros. Me imagino un estadio lleno y ellos saben que cuanto más participan más se les siente porque yo lo viví de jugador y de entrenador”, dijo el técnico tras serle preguntado qué esperaba tras los silbidos de hace una semana.

Estamos en un período de insertar de la mejor manera a los jugadores que han venido"

En su discurso de que el equipo pelea por ser tercero en la tabla, Simeone tiene al Sevilla como uno de los grandes rivales directos junto al Valencia. También ve en el conjunto de Emery muchas similitudes con su equipo: “Los dos trabajamos bien la pelota parada. Desde la llegada de Emery se hicieron más competitivos desde la agresividad. Del medio campo hacia arriba les caracteriza la velocidad, da igual que juegue Vitolo, Deulofeu, Aleix Vidal o Reyes”. En ese análisis del Sevilla, Simeone dejó entrever la que fue una de sus peticiones que no fue satisfecha por el club cuando este verano buscaba un delantero de similares características a las de Diego Costa. Pidió a Fernando Torres y también a Bacca para poder contar con una referencia potente y veloz. El club le ofreció a Lukaku, con el que ya había un acuerdo cerrado, pero Simeone descartó al delantero belga. “El Sevilla tiene un gran delantero que les hará dar un salto de calidad”, dijo en referencia al colombiano Bacca.

El entrenador rojiblanco también volvió a reconocer que el Atlético sigue en construcción y que el proceso está en los tiempos que esperaba: “Es lo que me imaginaba, estamos en un período de insertar de la mejor manera a los jugadores que han venido. Ahora hay muchos partidos seguidos y de por medio hay poco tiempo para entrenar”. Sobre el ensamblaje se refirió a que la lesión ha frenado el trabajo con Mandzukic y también a Griezmann, Ansaldi y Siqueira. Al francés, según Simeone, aún le falta la continuidad que él demanda: Griezmann es importantísimo para nosotros, pero los jugadores son más importantes cuando tienen continuidad y nosotros lo necesitamos en su mejor versión. Tiene gol y uno contra uno, puede darnos profundidad y puede jugar en distintas posiciones. Pero con todo el respeto, no es lo mismo la Real que el Atlético en exigencia”. Sobre los dos laterales izquierdos que están en plena competencia concluyó: “Ansaldi es más profundo y Siqueira más ordenado, esperemos que ambos crezcan en lo que les falta”.

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Sobre la firma

Ladislao J. Moñino
Cubre la información del Atlético de Madrid y de la selección española. En EL PAÍS desde 2012, antes trabajó en Dinamic Multimedia (PcFútbol), As y Público y para Canal+ como comentarista de fútbol internacional. Colaborador de RAC1 y diversas revistas internacionales. Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Europea.

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