México recupera la sonrisa

Cuarenta años después México volvió a ganar un partido en un Mundial de baloncesto. Tras sus dos derrotas ante Lituania (74-87) y Eslovenia (89-68), la selección azteca, que no se clasificaba para la fase final de un Mundial desde 1974 en Puerto Rico, se impuso a Angola por 79-55 en un partido que presenciaron 5.565 espectadores en el Gran Canaria Arena. "Hemos realizado un encuentro muy serio y completo, con poca rotación, imponiendo nuestro ritmo y cerrando el rebote ante un equipo que va muy bien al rebote de ataque, para poder correr en momentos determinados. Sabíamos que en juego estaba la llave para acceder a la siguiente ronda", explicó el seleccionador de México, el español Sergio Valdeolmillos.

El ala-pívot de 29 años, Héctor Hernández, brilló ante la defensa angoleña, convirtió seis triples, sumó 24 puntos y capturó cinco rebotes. La superioridad de México en el rebote resultó determinante. Gustavo Ayón, el exjugador del Fuenlabrada que jugó la última temporada en los Hawks de Atlanta, marcó la línea bajo tableros y aportó 12 rebotes, además de 17 puntos, y el alero Román Martínez, recién fichado por el MoraBanc Andorra, consiguió 12 puntos y cuatro rebotes. México, que todavía tiene que medirse a Australia y Corea del Sur, aspira al menos a conseguir la cuarta plaza para poder estar en los octavos de final que disputaría en Madrid, probablemente contra Estados Unidos.

Eslovenia domina la clasificación en el grupo D por delante de Australia y Lituania, con dos triunfos cada uno, después de que la selección 'aussie' se impusiera a la lituana por 82-75 con 18 puntos de Joe Ingles, el alero que jugó en el Barcelona y que ganó la última Euroliga con el Maccabi, 14 de Matthew Dellavedova, alero de los Cleveland Cavaliers, y 10 de Brad Newley, el también alero del Herbalife Gran Canaria.