El gigante Neuer llega a Maracaná

Moacyr Barbosa fue elegido el mejor portero del Mundial 1950 y Olivier Kahn ganó el trofeo al mejor jugador en la Copa 2002 por delante de Ronaldo. Ambos resultaron decisivos para que Brasil y Alemania alcanzaran respectivamente las finales de Maracaná y Yokohama y a los dos se les recuerda igualmente por un error en el último y decisivo partido ante Uruguay y Brasil. No hay dudas tampoco sobre la categoría de Manuel Neuer en el torneo de 2014. Aunque se cuentan actuaciones soberbias de muchos guardametas, el alemán ha merecido el elogio unánime de la crítica porque no solo evitó goles cantados, sino que además ejerció de jugador de campo, el mejor ante Argelia. A Neuer solo le queda un peldaño para coronar su excelente campeonato en Brasil: hoy puede redimir a Barbosa y Kahn en Maracaná.

Es el mejor que he visto jugando con los pies”, afima Guardiola, su técnico en el Bayern

"Quema los palos Barbosa/del arco de Brasil/la condena del Maracaná/se paga hasta morir", cantó Tabaré Cardozo. El portero brasileño, que ganó todos los títulos con el Vasco de Gama, no tapó el tiro de Alcides Ghiggia y Uruguay ganó el título de 1950. A Moacyr le cayó encima la portería, el estadio de Maracaná con 200.000 espectadores y una condena de por vida, señalado como culpable del Maracanazo. Barbosa utilizó 13 años más tarde los postes de Maracaná como leña para un asado en su casa de Rio. Khan nunca fue crucificado por no atajar el tiro de Rivaldo y propiciar que Ronaldo embocara el rechace en la final de Japón. El gol, sin embargo, propició la victoria brasileña, rematada después por un segundo tanto de El Fenómeno, y figura como una mancha negra en el currículo del arquero de Alemania.

"En Brasil me tienen que recibir con los honores de un jefe de Estado", afirmó hace unos días Kahn. "Me deben una Copa". Ahora se podrá cobrar la deuda pendiente desde 2002 por intervención de Neuer, un meta moderno, nada que ver precisamente con el agresivo Kahn ni con los históricos arqueros de la Mannschaft, desde el mítico Sepp Maier al excéntrico Jens Lehmann, pasando por Harald Schumacher, protagonista de aquella entrada escalofriante contra Patrick Battiston en el Mundial de España 1982. La portería siempre fue una cuestión de Estado en Alemania. La diferencia es que ya no se defiende desde la línea de cal con contundencia y carácter sino que se guarda con la personalidad, la suavidad y el talento de Neuer, seguramente la figura que mejor simboliza el cambio en el equipo de Alemania.

La cara de niño contrasta con su envergadura (1,93 m y 92 kilos) de manera que parece un gigante amable, noble, sereno y sobrio. Tiene, en cualquier caso, mucha autoestima y, sin ser arrogante, se siente muy alemán, circunstancia decisiva para entender su éxito en el Bayern después de que Louis Van Gaal se opusiera a su fichaje -prefería a Thomas Kraft después de quitar a Hans Butt y se montara la de Dios es Cristo en Múnich cuando en 2011 fue traspasado por 27,2 millones. Nacido en Gelsenkirchen en 1986, en la cuenca del Ruhr, Neuer convivió con las nuevas olas migratorias y fue un hincha irreductible del Schalke 04. A los cinco años ya iba al campo y de adolescente trepaba la alambrada del Park Stadion, festejaba los goles en la curva norte y soñaba con jugar en el sub-16 para ser recogepelotas y tocar a Lehmann.

Es el portero moderno por excelencia" José Luis Chilavert

Neuer formó parte de la peña Buuerschenchaff del club de los corazones (Meister der Herzen), fue un royal blue auténtico, y rivalizó duramente con el Bayern. Los aficionados de Múnich le tenían por un ultra que, siendo ya un excelente portero, se mofaba hasta de Kahn. La progresión de Neuer fue espectacular en la Bundesliga y en la Champions. No solo era decisivo en la cancha, sino que intervenía en el vestuario, como quedó constatado en la salida del técnico Felix Magath y en el homenaje de la grada a Raúl durante la eliminatoria con el Inter. Alex Ferguson afirmó después que el United ganara en Gelsenkirchen por 0-2 en abril de 2011: "El partido que ha hecho es el mejor que le he visto a un portero en mi carrera". Ya no quedaba más alternativa: Neuer se iba a Manchester o a Múnich.

"Puedes hacer las paradas que quieras, pero nunca te aceptaremos", se leyó en una de las pancartas de bienvenida a Neuer en el Bayern. Tuvo que intervenir el club y Neuer aceptó que de momento no se acercaría al fondo donde rugen los aficionados más encendidos del club de Baviera. Había que darse un tiempo y asumir errores como el que tuvo en su debut cuando con sus puños golpeó al aire y propició el gol de Camargo en el partido contra el Borussia Moenchendgladbach. Ahora incluso se aplaude que salga de su portería hasta el córner para facilitar la cesión de Lahm y salir con la pelota jugada como pasó en el Allianz Arena en el encuentro ante el Werder Bremen.

Hoy es Guardiola, su técnico en el Bayern, el que sigue el mensaje de Ferguson. "Es el mejor portero que he conocido en mi vida en el juego con los pies". Admira el entrenador la paciencia y precisión de su portero en la toma de decisiones hasta el extremo de advertir en su figura la de un medio centro clásico. A la prensa internacional le pareció la reencarnación del Kaiser Beckenbauer en su partido contra Argelia, sobre todo porque repartió el juego como el mejor líbero, mientras que ante Francia su mano derecha pareció un poste por cómo rechazó un tiro espectacular de Benzema. Explosivo, fuerte física y mentalmente, a veces parece que hace las cosas sin esfuerzo, nada de cara la galería, excelente en el juego aéreo, siempre anticipando en la salida, muy rápido y reactivo en la línea de portería.

Puedes hacer las paradas que quieras, pero nunca te aceptaremos", se leyó en una de las pancartas de bienvenida al Bayern

No se tira sino que se desplaza, cubre la espalda de los centrales y el equipo juega sin retrovisor. La seguridad que transmite permite al equipo dar un paso al frente, dejarse ir, porque los futbolistas saben que difícilmente tomará un gol y en contrapartida armará el ataque con sus pases en largo o corto, al costado o cambiando de orientación, dada su buena lectura del juego y del partido. "Tengo que parar, porque cada error puede ser un gol", afirma, "apoyar a la defensa y asegurarme de que cada jugador esté en su posición para guiarles con el pase".

Únicamente ha encajado cuatro goles después de protagonizar 25 paradas. "Le tenemos mucha confianza", ratifica Joachim Löw, que le dio la confianza en el Mundial de Sudáfrica después del suicidio de Robert Enke y la lesión en la costilla de René Adler. "Su tranquilidad es contagiosa, siempre toma la decisión correcta", añade el seleccionador en la misma línea que Guardiola. "Mide muy bien las distancias con y sin balón". Y remacha Kroos. "Jugamos a cubierto con Neuer". "Yo diría que es el portero moderno por excelencia", concluye el afamado meta paraguayo José Luis Chilavert. "Es el mejor portero del mundo", acaba Kahn, "y puede ser también el mejor jugador de la Copa", en competencia con su compañero goleador Thomas Müller (5).

Ya ganado del europeo sub-21, Neuer aspira hoy a coronarse campeón de mundo con la absoluta en el estadio que crucificó a Barbosa y cobrar de paso la deuda que tiene Brasil con Kahn.