“Pitar a Cristiano no es comprensible”

La perspectiva de quedar terceros en la clasificación, pasara lo que pasara ante el Rayo, debió generar una perturbación muy seria en los madridistas que acudieron a Chamartín a ver el partido. La lluvia persistente no ayudó a que la muchedumbre se tomara las cosas con calma. El Madrid había sido el líder de la tabla hasta hacía una semana y el entusiasmo de la gente había recorrido las gradas junto con promesas de triplete. Todos aquellos sueños se transformaron en amargura después de las derrotas contra el Barça y el Sevilla. Ayer, durante más de una hora, el público pitó a sus ídolos. Pitó al entrenador, Carlo Ancelotti, porque es el jefe; pitó a Benzema por no haber metido cuatro goles el día del clásico; pitó a Bale por su individualismo indisimulado en Sevilla y por fallar una ocasión clamorosa ante Rubén; pitó a Diego López porque casi cada remate que le hicieron en el Sánchez Pizjuán fue a la red; y hasta pitó a Cristiano por no asistir a Morata en una jugada irrelevante, cuando el Rayo perdía 4-0.

Frente el Rayo lo hemos hecho bien porque hemos utilizado mucho la contra” Ancelotti

“Creo que el miércoles ante el Dortmund vamos a tener un muy buen ambiente”, dijo Ancelotti, “porque creo que todo el mundo tiene un sueño que es la décima. Todo el mundo comprende que la podemos ganar si contamos con la ayuda de todos. Todos juntos para llegar a este sueño. No creo que los pitos hagan daño a Diego López porque él está focalizado en su profesión”.

“Comprendo los pitos porque de vez en cuando lo hemos merecido”, prosiguió el técnico. “Pero en este momento los jugadores están haciendo un gran esfuerzo. Puede ser que no lo hayamos hecho bien en los últimos dos partidos pero tenemos que seguir y necesitamos la ayuda de todos. Además, pitar a Cristiano no es tan comprensible”.

Cristiano marcó su gol 44 esta temporada en todas las competiciones. El portugués estuvo excelente, como casi siempre, y anotó el tanto más importante de la noche: el primero. Esto le convirtió en el madridista que ha marcado en más encuentros seguidos: nueve. El hombre se retiró a los vestuarios con la rodilla izquierda ensangrentada después de una dura faena en la que repitió otro capítulo de su angustiosa competencia con interna con Bale. Ambos delanteros pugnan por acaparar protagonismo de un modo exagerado.

“Les diré a los jugadores que hay que seguir así”, explicó Ancelotti, cuando le preguntaron por cómo gestionará el desenlace de la temporada en el plano anímico. “Podríamos estar en una mejor posición pero creo que llegamos físicamente bien y mentalmente con capacidad de reacción. Seguimos mirando al futuro con optimismo. Faltan pocos partidos para que acabe la temporada. Si ganamos todos los partidos por lo menos ganamos la Champions y la Copa. Tenemos que ser positivos”.

El italiano cree que las derrotas ante el Sevilla y el Barça no han descuadrado a su equipo, que durante 30 partidos labró una reputación de solidez. Curiosamente, apuntó abiertamente que el contragolpe, entendido como un modo de afrontar los partidos, es lo que mejor se acomoda a las características del Madrid. “En una semana no han cambiado muchas cosas”, comentó. “Hemos hecho pequeños errores defensivos contra el Barcelona y en Sevilla. Contra el Rayo lo hemos hecho bien porque hemos utilizado mucho la contra y atrás hemos tenido un buen equilibrio”.

Paco Jémez coincidió con Ancelotti. El técnico rayista dijo que hasta que su equipo no se desplegó completamente el Madrid no brilló. “A mí me ha gustado el partido”, comentó el entrenador. “Competimos con dignidad frente a un rival que sabemos que está por encima de nuestras posibilidades. Hasta que el partido se ha abierto lo hemos tenido muy controlado, cosa que tiene mérito contra un rival como el Madrid que tiene jugadores que no solo son técnicamente mejores que nosotros sino que físicamente son portentos que corren más y llegan antes a las situaciones. Al final, nos da exactamente perder por dos, tres o cinco goles”.