Federer: “Aún pueden contar conmigo”

Roger Federer y Alexandr Dolgopolov jugarán por la final de Indian Wells tras superar sus partidos de cuartos, ronda en la que aún deben enfrentarse Novak Djokovic con Julien Benneteau y John Isner con Ernest Gulbis. El suizo, séptimo cabeza de serie, se impuso a Kevin Anderson por 7-5 y 6-1 en 69 minutos, negándole a su contrario su mejor arma: el gigante sudafricano (2,03m) solo sumó tres aces, neutralizado por la elasticidad y frescura de piernas con la que el campeón de 17 grandes se movió al resto. Con este resultado, Federer vuelve al top-5.

"Las cosas son más fáciles ahora y puedo aprovechar el hecho de que estoy sano. El año pasado no fue así durante gran parte del tiempo [se lesionó en la espalda]. No podía esperar grandes cosas de mí. Pero cuando me encuentro bien, esto es lo que puedo esperar. Está bien demostrármelo a mí mismo, a mi equipo y a los fans: aún pueden contar conmigo", manifestó el suizo, que juega en 2014 con una raqueta más grande que nunca, apostando por aumentar el riesgo desde que contrató a Stefan Edberg como técnico y afrontando la proximidad de los 33 años como una oportunidad de demostrarle al mundo que su talento no tiene fecha de caducidad. Para empezar, lleva una racha de diez victorias seguidas, lo que no lograba desde 2012, ya ha ganado tantos títulos como en 2013 (uno, en Dubái) y puede presumir de victorias de prestigio (ha ganado ya a cuatro top-10, incluido Novak Djokovic)

Por su parte Dolgopolov mantuvo ese estado de gracia que le llevó a ganar a Rafael Nadal y batió al canadiense Milos Raonic por 6-3 y 6-4. Fue un recital al resto. "Me moví muy rápido", indicó el jugador, al que su contrario recriminó en broma que devolviera sus misiles como si nada. "Pude devolver más pelotas de lo habitual contra él. Sirve realmente bien y sabía que debía hacer eso; estoy satisfecho por cómo me he anticipado a su saque", añadió el finalista del torneo de Río de Janeiro.