Ángel Torres: “Se nos había olvidado jugar, aburríamos a las ovejas”

“Se nos había olvidado jugar al fútbol. Aburríamos a las ovejas y había que buscar un revulsivo y cambiar el chip. Esto funciona así”, espetó el presidente del Getafe, Ángel Torres, en la presentación de Cosmin Contra como nuevo entrenador del equipo. Un análisis alejado de convencionalismos que monopolizó una puesta de largo transformada en un llamamiento a la afición para que arrope a su equipo (16º con 27 puntos, solo uno sobre los puestos de descenso). “Ni con las puertas abiertas se llenaría el estadio. No quiero entrar en demagogias ni queremos gente que venga a hacer bulto, pero buscaremos fórmulas porque nos estamos jugando mucho y necesitamos remar juntos”, apuntó. “He tomado una medida en contra de mi voluntad, pero necesitábamos otro carácter y otras ideas”, explicó Torres, que el día anterior no compareció en la despedida de Luis García. “Tranquilos que tengo carácter de sobra para que cojan todos los jugadores”, recogió el guante el técnico rumano, que antes de su comparecencia ante los medios dirigió su primer entrenamiento.

Hay que llenar el Coliseum desde el viernes, como se llenaba en mi época. Hago un llamamiento a la afición”

“Conozco desde el jardinero hasta el último empleado. No necesito periodo de adaptación, estoy en mi casa. Además no hay tiempo”, anunció Contra con frases cortas y tono enérgico. “Tenemos plantilla para salvarnos. Seguro. Estos jugadores han estado quintos en la clasificación porque son buenos. Ahora están muy apagados y hay que cambiar el ánimo, la mentalidad y las ganas. Todo eso se cambia trabajando y ganando. Hay que llenar el Coliseum desde el viernes, como se llenaba en mi época. Hago un llamamiento a la afición”. Contra, de 38 años y con cuatro de experiencia en los banquillos, rescindió su contrato con el Petrolul rumano, equipo con el que ganó la Copa el año pasado y que en este tenía en el tercer puesto de su Liga. Esta temporada solo había perdido tres de los 42 partidos que había dirigido y tenía encarrilada su clasificación para disputar la Liga Europa por segundo curso consecutivo, pero renunció a todo por volver a Getafe. “Llegué a un acuerdo con él hace unos meses para que fuera el entrenador en los dos próximos años porque Luis García acababa contrato y no iba a seguir, pero todo se ha precipitado”, explicó Ángel Torres. “Mi sueño era entrenar en Primera y doy las gracias a la gente de Rumanía que me lo ha permitido”, constató el técnico. “Me gusta el buen fútbol. Que mis jugadores aprieten, que creen muchas ocasiones y que marquen goles”, anunció Contra cuando le preguntaron por su ideario y estilo de juego.

Convencido de que la plantilla del Getafe tiene más calidad que las de sus rivales por eludir el descenso, pero quizá también menos determinación y carácter que cualquiera de ellas, Ángel Torres ha recurrido a uno de los jugadores más temperamentales que han pasado por la caseta del Coliseum para frenar la imparable cuesta abajo del equipo. El conjunto azulón lleva ocho derrotas y cuatro empates en sus últimos 12 partidos (con un pésimo balance de cinco goles a favor y 21 en contra) y tan solo ha sumado siete puntos de los últimos 48 posibles. Para espolear a los jugadores y descargar de presión al nuevo entrenador, Torres asumió su responsabilidad en la situación y apuntó a “una plantilla acomodada por culpa de los contratos largos”. “Nos habíamos acomodado todos, yo el que más. A estos jugadores hay que exigirles mucho más, pero necesitan desbloquearse y ganar un partido. Calidad individual tenemos, nos ha faltado calidad como bloque”, analizó Torres.

La llegada del nuevo entrenador coincide además con el fichaje del brasileño Julio César, exportero del Granada

Contra dirigirá a varios jugadores que fueron compañeros suyos: Gavilán, Aléxis, Codina, Rafa y Pedro León junto a los que vistió de azulón y su compatriota Ciprian Marica con quien ha compartido internacionalidad con Rumanía. Para este último tuvo sus primeras palabras de acicate. “Conozco a Ciprian y aquí está al 25 por ciento de su potencial. Puede y debe dar mucho más”. La llegada del nuevo entrenador coincide además con el fichaje del guardameta brasileño Julio César, ex del Granada, que aterriza en el Coliseum procedente del Benfica para suplir la baja por lesión de Moyá, que fue operado hace cuatro días de la rodilla derecha y se perderá lo que resta de temporada. También se renueva al completo el cuerpo técnico con Ángel López como segundo entrenador, Emilio López como preparador de porteros y Óscar García como preparador físico, que regresa al club tras ocupar ese puesto en tiempos de Schuster y Laudrup. “Esperemos que esto cambie desde el viernes”, expresó Torres. “Seguro”, le respondió su nuevo entrenador. Getafe se entrega a Cosmin Contra como revulsivo. Su primera final este viernes a las 21.00 frente al Granada.