Plushenko, el desaparecido

Evgeni Plushenko ha desaparecido. Al menos a los ojos del público. Estaba previsto que hoy a las 16.45 saltara al hielo de la pista de entrenamiento junto a Yuzuru Hanyu, uno de los grandes favoritos a ganar el oro en patinaje artístico, y otros cuatro rivales. A la hora prevista allí estaban todos… menos Plushenko. Aunque en los últimos días se ha especulado sobre la posibilidad de que el divo ruso fuera sustituido a última hora por un compatriota, su nombre entró en el bombo que ayer sorteó el orden de salida de los competidores para el jueves, incluidos los españoles Javier Fernández, candidato a todo, y Javier Raya.

¿Y dónde está Plushenko? Pues, probablemente, descansando tras la competición por equipos en la que ayudó a Rusia a lograr el primer oro en Sochi. Como la competición es muy larga (empezó un día antes de la inauaguración y termina el jueves 20), muchos patinadores han huido de la costa del Mar Negro para poder entrenarse en condiciones, ya que al compartir pista con los de short-track tienen más restringido el acceso al hielo. Es el caso de la italiana Kostner e incluso de la gran esperanza rusa, la diminuta Lipnitskaya, que ha vuelto por unos días a Moscú.

No se sabe si ese es también el caso del ruso, campeón olímpico en Torino 2006 y plata en Salt Lake City 2002 y Vancouver 2010, además de tres veces campeón del mundo y otras siete europeo. Una leyenda.

La presión para uno de los mejores patinadores de la historia es enorme

En la pista en la tarde del martes se daba por hecho que el ruso, que tiene 31 años, arrastra dolores de espalda y apenas ha competido este año, saldrá al hielo el jueves para hacer el programa corto. Lo que no tienen tan claro es que aguante hasta el día siguiente, al programa libre que decide las medallas. Más aún si el primer día se ve lejos de los mejores.

La presión para uno de los mejores patinadores de la historia es enorme. Rusia, una potencia en este deporte, solo consiguió una plaza olímpica para sus hombres y ninguno de ellos, ni siquiera Plushenko, tiene un programa a la altura del de los mejores del mundo. Por lo visto aquí en Sochi son el japonés Hanyu, un prodigio de coordinación y arte, compañero de entrenamientos de Javier Fernández en Canadá, el propio Fernández y el canadiense Chan tienen más posibilidades que el ruso. El sorteo además les ha favorecido: los tres saldrán en el cuarto grupo, por este orden: Hanyu, Fernández y Chan. Plushenko lo hará mucho antes, cuando los jueces están aún fríos. Lo hará en séptimo lugar. O no.