Betis-Rubin Kazan, Maribor-Sevilla y Dinamo de Kiev-Valencia

El sorteo de los dieciseisavos de final de la Liga Europa deparó un emparejamiento asequible para el Sevilla, otro más complicado para el Betis y un último de cierta entidad para el Valencia. El Sevilla jugará frente al líder de la liga eslovena, el Maribor, mientras que el Betis lo hará con el Rubin Kazan. El Valencia, por su parte, se medirá a un clásico del fútbol europeo como es el Dinamo de Kiev. No obstante, la Liga Europa queda muy lejos para el Valencia, inmerso en una crisis deportiva que se ha saldado con la destitución de su entrenador, Miroslav Djukic. Además de estos emparejamientos de 1/16, la UEFA deslizó los cruces de los octavos de final. Un planteamiento que trae consigo la posibilidad histórica de un derbi sevillano si Betis y Sevilla superan sus respectivas eliminatorias. El Valencia, por su parte, se las verá con el vencedor de la eliminatoria Lazio-Ludogorest si derrota al Dinamo de Kiev. El sorteo fue esquivo a emparejamientos de enjundia, aunque sí deparó algún que otro enfrentamiento interesante como el Swansea-Nápoles, el Juventus-Trabzonspor o el Oporto-Eintracht de Frankfurt.

Sevilla y Valencia participaron en el sorteo como primeros de grupo y dispondrán de ventaja de campo en los duelos que tendrán lugar los próximos 20 y 27 de febrero.

El Sevilla, séptimo clasificado en la Liga, se enfrentará a un rival asequible como es el Maribor esloveno. Su máximo goleador en la fase de grupos, donde eliminó al Zulte y al Wigan, es el centrocampista Mezga. Es un conjunto sin nombres rutilantes y cuyo director deportivo es Zlatko Zahovič, exjugador del Valencia. El Maribor es el líder de la liga eslovena. “Teniendo en cuenta los rivales que había en el bombo creo que podemos sentirnos satisfechos”, manifestó Unai Emery, entrenador de los andaluces.

El Valencia, en plena crisis institucional y deportiva tras la destitución de Miroslav Djukic, disfrutará de un emparejamiento complicado frente al Dinamo de Kiev, campeón de la Recopa en dos ocasiones (1975 y 1986) y tres veces semifinalista de la Liga de Campeones. Los ucranianos eliminaron en la fase de grupos al Rapid de Viena y al Thun, pasando como segundos de un grupo donde el Genk fue el primero. Aunque venido a menos ante el poderío del Shakhtar, el Dinamo tiene en su plantilla buenos jugadores, caso del internacional ucraniano Yarmolenko o el delantero congoleño Mbokani, procedente del Anderlecht.

El Betis, por su parte, anda más preocupado por su delicada situación en la Liga que por el futuro en la Liga Europa. La suerte le deparó un enfrentamiento con el Rubin Kazan ruso. Un rival no deseado donde militan dos jugadores españoles, caso de César Navas e Iván Marcano, así como otros conocidos de la liga española como son el delantero venezolano Salomón Rondóno el centrocampista Wakaso. El Betis juega el primer partido en casa y luego realizará un largo viaje hasta tierras rusas. Kazan está a 800 kilómetros de Moscú, aunque es posible que el encuentro se juegue en la capital rusa, tal y como le ocurrió al Atlético de Madrid la pasada temporada. El equipo español cayó eliminado ante el Rubin. El choque se jugará durante el parón invernal de la Liga rusa, donde el Rubin es el décimo clasificado. “Era un rival que prefería evitar”, afirmó Garrido, técnico del equipo verdiblanco.