Márquez desata la locura en Cervera

Más de 5.000 personas aclamaron a Marc Márquez en las calles de Cervera, donde ni el frío ni la niebla ni la lluvia impidieron el normal desarrollo de un pasacalles en homenaje al campeón del mundo de MotoGP.

El vehículo, de color rojo con el 93, el número de Marc, y el 12, de su hermano Álex piloto de Moto3, ha tardado casi una hora en recorrer un trayecto de apenas kilómetro y medio desde la sede del club de fans 'Márquez 93', hasta la plaza Pius XII, donde estaba montado un gran escenario y dos pantallas gigantes. Además, el Teatro de La Passió de Cervera se abrió para el acto y más de 1.200 aficionados siguieron el desarrollo del mismo en otra gran pantalla en el escenario del teatro.

Bajo una persistente lluvia, unos mil aficionados siguieron en directo la llegada de los hermanos Márquez y los miembros de su equipo que le acompañaban. En el escenario, y a los compases de We Are the Champions, el propio Marc animó la fiesta al grito de: “¡Qué bote Cervera!”. “No sé qué es lo que tengo que hacer ahora para volver a tener un recibimiento así. El tiempo no ha acompañado, pero vuestra respuesta es extraordinaria”, agradeció el piloto. “Un título así se tiene que celebrar bien, porque siempre cuesta mucho conseguirlo y también es un poco suyo”, añadió el catalán, que se convirtió el pasado domingo en Valencia en el piloto más joven en conseguir la corona de MotoGP.

El mánager de Marc, Emilio Alzamora, quiso ceder el protagonismo al piloto, pero finalmente tuvo que saltar al escenario. “Desde los 12 años Marc ha despuntado, pero lo que ha hecho este año es algo muy grande y toda la gente de Cervera tenéis que sentiros orgullosos de él”, dijo.