Torres se forra con la contra del Chelsea

Otra vez fue fundamental Cech en el Chelsea, que acabó goleando al Schalke en Gelsenkirchen con un recital a la contra del equipo de Mourinho (0-3). Dos tantos de Torres, el primero de cabeza y el segundo al finalizar un contragolpe de Hazard, y el tercero del propio volante belga. El persistente ataque del Schalke se topó con la inspirada noche del portero checo.

El cuadro de Mourinho se adelantó al principio por una pillería de Torres, que cazó al segundo palo, tras botar el balón en el césped, un centro de córner de Lampard prolongado al primer palo por Ivanovic. El Chelsea, refugiado en su campo, corrió a toda mecha cuando Hazard recuperó una pelota, la cedió a Oscar y este, apurado, a Torres. Al español se le fue largo el control con la zurda, pero eso le permitió limpiar al portero Hildebrand y embocar a puerta vacía.

El Nápoles sigue imponente. Derrotó 1-2 al Olympique de Marsella con un gol de Callejón

Saltan chispas en el triple empate en el grupo F, el más fuerte de esta fase de la Champions, con seis puntos del Dortmund, el Nápoles y el Arsenal. El Marsella ha perdido los tres encuentros. Un gran ritmo presidió anoche el partido en el Emirates Stadium. La sonrisa estruendosa de Jürgen Klopp, desde la grada por sanción, delataba la victoria a última hora de sus chicos (1-2) gracias a un empalme de Lewandowski a un centro desde la derecha de Grosskreutz. El castigo fue duro para un Arsenal que había atacado mucho más, sobre todo a raíz de la entrada de Cazorla en el segundo tiempo por Wilshere. El volante español participó en media docena de ataques, uno de ellos un disparo suyo al larguero. Aunque, fiel a su leyenda, el cuadro de Wenger sucumbió por su debilidad en las áreas. Antes había empatado Giroud el tanto inicial de Mikhitaryan.

En esa acción, Ramsey se dejó robar la cartera por Reus cuando trataba de salir jugando desde su propia corona del área. El medio alemán le rebañó el balón, se lo entregó a Lewandowski y este a Mikhitaryan, que disparó a gol. La insistencia de los gunners tuvo premio cuando Özil abrió a la derecha y tras el centro del lateral Sagna, se liaron en el despeje Subotic y Weidenfeller, aprovechándose Giroud para remachar el merecido empate. Lewandowski volvió a despertar la melancolía de los gunners.

El Nápoles de Rafa Benítez sigue poderoso en la Champions. Solo se vio exigido al final ante el Marsella en el Velodrome por el gol de Andrea Ayew, pero había sido muy superior (1-2) con los tantos de Callejón y Zapata. El cuadro de Benítez había perdonado ya varias ocasiones cuando Callejón recibió un pase largo de Higuaín, entró por el carril del 10, acolchó en carrera el balón con el pecho, amagó con pegar con la derecha, pero escondió la pelota hacia su cuerpo y remató tan rápido que a Mandanda, el meta del Marsella, no pudo reaccionar. Entró el cuero por su propio palo (m. 42). El equipo de Benítez agudizó su dominio en el segundo tiempo, también en la salida a la contra. Una de ellas, intervenida por todos sus delanteros, la culminó el colombiano Zapata con un trallazo colocado tras una magnífica dejada de espuela de Mertens. Al final, salvo por el tiro de Ayew, Reina mantuvo a raya los ataques del ya descolgado Marsella.

En Escocia, el Ajax volvió a mostrar su inocencia defensiva ante el Celtic (2-1)

El Oporto sufrió la expulsión relámpago de la Champions: la de su central Herrera en el minuto 5 (dos amarillas, la segunda por adelantarse a la barrera), y aguantó al Zénit casi todo el encuentro. Cayó al final. Ante el chaparrón de su excompañero Hulk en el segundo tiempo. El brasileño terminó su exhibició con un centro desde la derecha rematado de cabeza por el exsevillista Kerzhakov (0-1).

Mientras, en Celtic Park, el Ajax volvió a mostrar su inocencia defensiva ante el Celtic (2-1). En concreto la de su central Denswil, autor de un penalti transformado por Forrest y después de un despeje hacia su propia portería a un tiro de Kayal. El gol final de Schöne llegó demasiado tarde.