“Ojalá fuera invisible”

A punto de sumar 60 partidos con la selección española, campeón del mundo y de Europa con La Roja, Sergio Busquets (Badía, Sabadell, 25 años) es señalado por sus colegas de profesión y por no pocos entrenadores como uno de los mejores centrocampistas defensivos del mundo. Xavi le llamó “el quitanieves” por la facilidad con la que limpia el campo pero a él, chico tímido, le sonrojan los elogios. Veterano desde juvenil, porque mamó el vestuario de la mano de su padre, Busi, el número 16, va para leyenda a su pesar.

Pregunta. Vuelve a la selección tras superar complicaciones de pubalgia. Xabi Alonso hubo de pasar por el quirófano por algo semejante ¿Es una lesión de medio centro? ¿Cómo está usted?

Respuesta. Empecé la temporada con molestias en los abdominales bajos, pero del pubis hace tiempo que estoy mejor. Cuando no estás al 100% se nota. No sabría decirle por qué pasa, he hablado con otros compañeros que han tenido las mismas molestias y no son mediocentros, así que diría que no es por la posición. Será un poco por el exceso de partidos, un poco de esfuerzo… Es un tema delicado, porque te llega a impedir comportarte con naturalidad. Yo tuve que dejar de entrenarme porque no podía golpear el balón ni correr. Pero eso se acabó, paré dos semanas y luego estuve varios meses con Juanjo Brau [fisioterapeuta del Barcelona] entrenándome por la tarde, haciendo trabajo de prevención, y me vino muy bien. Es sacrificado, pero evité el quirófano.

P. ¿Ha cambiado su manera de jugar este año?

R. No, no, en nada. Juego igual. Al contrario, estamos recuperando viejas costumbres, y adaptándonos a un nuevo entrenador que nos aconseja algunas cosas, pero la filosofía y la manera de jugar es la de Pep y Tito.

P. ¿Arriesga más, es más vertical?

R. No, para nada, no arriesgo más ni soy más vertical. Si hay espacios los he de aprovechar, puede que en alguna jugada o en algún partido...

P. ¿Cómo vivió el debate que se generó?

Me gusta cómo da las charlas Martino, tiene el don de la palabra de los argentinos”

R. Lo viví al margen. Muchas de las cosas que te llegan te hacen gracia, en gran parte te ríes del debate. La gente habla por hablar, pero te tienes que acostumbrar porque ya sabes de qué va esto. Nosotros sabíamos que no había ninguna intención de perder la filosofía. Hubo partidos en los que no hemos jugado bien, pero eso ya pasaba antes, con Guardiola y Tito.

P. ¿Qué tiene Martino que gusta tanto a los jugadores? Dicen que es una mezcla de Luis, Del Bosque, con mucho gusto de Pep y Tito… ¿Qué le transmite?

R. Cercanía. Yo con Luis no estuve, pero tiene un poco de todos los demás, es cierto. Creo que se nota que ha sido futbolista. A la hora de explicar las cosas se hace entender y deja hacer, dentro de una manera personal de trabajar. A mí me parece muy bueno y sí, la verdad, hemos conectado bien. Me gusta su trato cercano y su manera de dar las charlas, porque motiva y explica, tiene el don de la palabra de los argentinos. Martino te convence. Yo le conocía solo del Mundial, cuando jugamos contra ellos, [era técnico de Paraguay], y últimamente de Newell’s. Me sorprendió relativamente. Cuando le conoces, ves que es muy válido y está muy preparado, que sabe de qué va esto.

Juego para los demás. Me gusta pensar que ayudó a que jueguen mejor”

P. Usted ha renovado de manera muy rápida.

R. Tampoco creo que sea así. Ha sido más discreto que rápido. Ha sido un proceso largo, con sus charlas, con la idea clara de que no nos queríamos desvincular. No es que no me imaginara en otro sitio, es que no lo he pensado. Si he de salir, saldré, pero en este momento ni yo ni el club queríamos que eso pasara. Juego en el club de mi vida y como aquí no estaré en ningún lado.

P. ¿Qué le parece que le señalen como el mejor en su posición?

R. Me siento un privilegiado por estar al lado de los mejores. Dentro, nunca he dudado de que se me valoraba. Cada vez más se me reconoce el trabajo fuera del equipo, pero lo que me sorprende es que se me valore en el extranjero, a eso no me acostumbro. Me da cierta vergüenza que jugadores importantes me señalen, la verdad, y me halaga, pero me da vergüenza. Será que soy tímido y no me gusta estar bajo los flashes. A veces pienso: “Ojalá fuera invisible”. Pero no se puede y asumo lo que toca, aunque me gusta poco. Por eso no tengo Twitter ni Facebook ni nada de eso. Y creo que no lo voy tener.

P. ¿En el campo, le iría bien ser invisible?

Hubo polémica por jugar Xabi y yo, luego se nos ha echado de menos”

R. Sí, sería perfecto. Un poco lo soy, porque no hago un juego muy vistoso, es un trabajo que pasa desapercibido. Intento hacer las cosas fáciles, sencillas, ayudo, robo y doy rápido. Juego para los demás porque es mi obligación. Sinceramente, me gusta pensar que ayudo a que jueguen mejor.

P. Eso dice Xavi, que juega para los demás. ¿Es su ejemplo?

R. Desde que subí. Siempre me ayudó mucho en el campo y congeniamos. Es imposible copiar su estilo, pero fuera del campo, su manera de vivir el fútbol y la profesión me gusta. De su experiencia, aprendo cada día.

P. ¿Ha subido un peldaño en el vestuario y en el campo?

R. Cada año que pasa me siento mejor futbolista, porque entiendo más cosas del juego. Luego, en el vestuario, hay unos que se van y unos que vienen y en ese escalón seguramente me ha tocado subir, es normal.

P. ¿Por qué les meten tantos goles en saques de esquina?

R. Porque somos bajitos. Podemos marcar al hombre, en zona, o en mixta. O como quieras. Pero seguiremos siendo bajitos. Los centímetros son los que son.

P. En Mallorca alcanza 60 partidos con La Roja. ¿Le impresiona?

R. Son muchísimos, estoy muy orgulloso. Excepto las dos últimas convocatorias he venido siempre en cinco años. Como hemos ganado todo, hemos jugado mucho. Y el entrenador ha confiado en mí. Estoy muy orgulloso.

No tengo Twitter ni Facebook. Y creo que no lo voy tener; no me gustan los ‘flashes”

P. ¿Prefiere jugar con doble pivote, como en la selección, o solo, como en el Barcelona?

R. Da igual, lo que quiero es jugar. No es lo mismo Xabi o Xavi que Cazorla o Cesc, volantes más ofensivos. Con Xabi me junto más. La verdad es que nos entendemos de memoria en el campo. Igual no tenemos tanta llegada pero somos un equipo sólido y muy consistente. Al principio hubo polémica, pero luego, cuando no hemos estado, se nos ha echado de menos, así va esto. Lo importante es el apoyo en el equipo y el tuyo personal. Yo soy autoexigente y sé cuándo lo hago bien o lo hago mal y cuándo juego mejor. Si de algo estoy contento es de haber sido regular.

P. ¿Qué le parece la posibilidad de que Del Bosque siga dos años más?

R. Muy bien, no me imagino este grupo entrenado por otra persona, no le veo razón. Sabe llevarnos a conseguir triunfos.

P. ¿Y que cite a Diego Costa?

R. Los grandes siempre tienen sitio. Está siendo uno de los mejores de la temporada, con gol y con trabajo. En el campo hace su trabajo y fuera dicen que es maravilloso y un buen compañero. ¡Quién no quiere en su equipo a uno como él!