Neymar lo pilla a la primera
Los barcelonistas destacan el “descaro” y “desequilibrio” de la estrella brasileña
En Escocia, la tierra donde se inventó el pass-ball, eso es, pasarse la pelota, el Barcelona aprendió a jugar sin Messi, encontró a Neymar y recuperó la esencia, si es que la perdió alguna vez. Al equipo le subió la autoestima por sentirse reconocible después del varapalo sufrido en su última salida europea en Múnich. Nada mejor que una visita al Celtic Park para medir la fuerza sin Messi.
Terminado el juego, en la carpa instalada junto a la estatua del Padre Wilfred, a las puertas del estadio, donde se improvisa la zona mixta después de los partidos, los jugadores del Barcelona desfilaron sonrientes camino del autocar, con Martino a la cabeza, satisfecho por el juego y por el privilegio de haber dirigido un partido en tan magno estadio. “Mal campo este, míster, para estrenarse en Europa, ¿no?…”, le soltó un gracioso. “Ché, ¡qué bárbaro, espectacular!”, respondió el rosarino, a quien el traje le caía como nunca. El entrenador estaba orgulloso por el juego, por el resultado y por la respuesta colectiva ante la ausencia de Messi.
Metió una mano Valdés para mantener el empate a cero; marcó Fàbregas, que regaló sus dos camisetas a jugadores rivales; se juntó Piqué con su hermano pequeño Bartra, que no dejó de recibir felicitaciones; se ajustaron los laterales, Adriano y Alves, comedidos como pocas veces; sentó cátedra Busquets, que jugó de memoria para Iniesta y Xavi, más laboriosos que acertados en el último pase; trabajó Pedrito, dinamizó Alexis y, en un partido global, emergió en Europa la fina figura de Neymar, al que tiraron mil veces y mil veces se levantó, aunque solo le pitaron cuatro faltas, el 25% de las que señalaron a favor del equipo. El brasileño demostró que se puede contar con sus servicios, con Messi y sin él. Ya se vio también en la ida de la Supercopa cuando marcó el gol decisivo del torneo en el Calderón.
“Me encanta cómo conduce el balón y sale en carrera por un lado o por otro”, dice Pedro
“Esta es la grandeza de este equipo, que falte quien falte, los demás responden” dijo Alves. “La clave fue la velocidad del balón”, afirmó Iniesta. El volante recupera sensaciones y cada vez se entiende mejor con Neymar, de quien dijo antes de abandonar Glasgow: "Es diferente, tiene talento, descaro y especialmente desequilibrio y eso es muy difícil, seguramente lo más difícil", abundó Iniesta. “Es una persona sencilla”, acabó. “Ahora le falta crecer”. Insistió Pinto: “Neymar tiene un punto de inocencia y es humilde”. También Pedro se lo mira con cariño por ser un tipo tímido: “Me encanta como conduce el balón y su capacidad para salir por un lado o por el otro en carrera”. Xavi, por su parte, insistió: “Es inteligente, lo pilla todo a la primera. Hemos hablado mucho porque le gusta mucho el fútbol, se le nota que ha visto mucho. Es muy futbolero”.
Neymar Jr no estuvo solo en The Paradise. Arropado por el equipo, que le buscó por su desequilibrio —Iniesta fue su mejor socio con 14 combinaciones—, el brasileño provocó el entusiasmo de los 750 seguidores azulgrana en la grada y la ira de los jugadores escoceses, a pesar de que ayer Brown pidió perdón por la jugada de la expulsión. “Me pisó”, se quejó Neymar, que estuvo acompañado también por su padre, que se zampó un rodizio antes del partido. El 11 abandonó el estadio sentado el último en el autobús y saludando con el pulgar de su mano derecha después que un aficionado requiriera su atención golpeando el cristal para hacerle una foto con el teléfono. Neymar, en Glasgow, sonreía de madrugada.
Sin moción de censura
La plataforma GO Barça anunció ayer que no seguirá adelante con la moción de censura al presidente del Barça, Sandro Rosell, y tres vicepresidentes. El grupo de opinión asume que no conseguiría el 15% del apoyo de los socios necesario según la Llei de l’Esport y que recogerán los estatutos del club a partir de la asamblea del sábado. “Trabajábamos con la idea de necesitar el 5% y nos cambiaron las reglas”, protestaron.
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