Pedro León reconduce al Getafe

Lisandro López y Alvaro Arroyo aprovecharon dos centros medidos de Pedro León, perfecto asistente con un "guante" en su bota derecha, para, a balón parado, dar tres puntos al Getafe en su encuentro ante el Celta.

Fue la única manera que tuvo el conjunto madrileño de romper la tela de araña en la que ambos equipos se habían metido. En dos jugadas aisladas, un par de saques de esquina muy bien botados por el jugador murciano, llegaron los dos únicos tantos de un partido aburrido en la primera parte y algo más atractivo en la segunda. Pese a que Luis Enrique y Luis García suelen apostar por intentar que sus equipos hagan buen fútbol, a veces lo logran y otras no dan con la tecla. En esta ocasión, en casi todos los tramos del partido, Celta y Getafe se atascaron en la salida del balón para ofrecer un partido tremendamente aburrido pese a las intenciones positivas de ambos contendientes.

El centrocampismo dominó toda la primera parte y ninguno de los equipos apenas fue capaz de disparar a portería en los 45 minutos iniciales. Con algunas variaciones en las alineaciones de ambos bandos, sobre todo en el Celta, que saltó al campo sin Charles, Alex López, Jonny y Fontás (iniciaron el duelo desde el banquillo), los elegidos para sustituir a sus compañeros apenas aportaron nada brillante al encuentro. La excepción fue Pablo Sarabia, casi el único capaz de ofrecer talento al espectador para crear ocasiones al servicio del Getafe. Desde la media punta, el canterano del Real Madrid ofreció algunas ideas que, aunque no acabaron en ocasiones, sí crearon inquietud entre el público del Coliseum Alfonso Pérez.

Entre bostezos, la poca gente que acudió al estadio azulón (el horario y el día no acompañaron), sufrió un primer acto insufrible, sin disparos a puerta, y que acabó de casualidad con el gol, del defensa Lisandro López. El central argentino acertó a rematar de cabeza un córner muy bien sacado por Pedro León y que sirvió para adelantar al Getafe en el minuto 44.

Ese fue casi todo el bagaje ofensivo de los dos equipos antes del descanso. Todos los acercamientos o los conatos de disparo fueron abortados en el último instante. El partido estaba destinado a resolverse a balón parado, como se demostró en la reanudación, cuando en una jugada calcada Alvaro Arroyo hizo el segundo de nuevo a la salida de un córner.

Lo volvió a sacar Pedro León, que, aunque por ahora no consigue afinar su estado de forma sobre el campo, todavía tiene un tremendo tacto en el pie derecho que da muchos puntos al Getafe. Suyas fueron las asistencias como lo fue en uno de los goles de Miku en la anterior victoria del Getafe hace dos semanas frente a Osasuna. Con casi un cien por ciento de acierto en el remate, y con dos goles a favor, los hombres de Luis García sólo tuvieron que replegar velas y esperar un contragolpe para sentenciar. Pablo Sarabia dirigió casi todas las operaciones y a punto estuvieron de llegar más tantos, pero, como casi siempre durante el partido, faltó concretar las ocasiones con algún disparo entre los tres palos.

Al final, el Getafe se llevó tres puntos que le sirven para mirar un poco más de lejos el descenso, para instalarse en la zona cómoda de la tabla, y, ya de paso, superar en la clasificación al Celta, que volvió a Galicia con los bolsillos vacíos.