Una final que vale un ascenso

Último partido. Una final. Villarreal y Almería se juegan en El Madrigal (19.00, Canal +), la segunda plaza que da el ascenso a Primera. Para el conjunto castellonense es una oportunidad única para resarcirse un año después de un descenso inesperado en una temporada que comenzó en Champions y que concluyó en Segunda y deprimido, ante un Almería que abandonó la élite dos cursos atrás. Descontando el Elche, los dos mejores equipos de la categoría se enfrentan ante 24.000 espectadores, 2.300 procedentes de Almería, que abarrotarán El Madrigal en un partido histórico que vale el retorno a Primera. El que pierda le quedará el comodín del play off.

Ha sabido resarcirse el club de Roig, aclimatarse poco a poco a una categoría dura y un campeonato largo, cambiar de entrenador a mitad de temporada, despedir jugadores y fichar a nuevos, esprintar, no desfallecer y llegar a la meta pletórico, con una afición volcada y un pueblo entusiasmado. Le queda el último esfuerzo. Marcelino lo tiene claro. “Parece que fue ayer cuando llegué y desde entonces hemos jugado 20 finales más críticas que el partido de hoy. Siempre hemos necesitado ganar”. Y recuerda: “Hace dos meses firmábamos entrar en la promoción”.

El Villarreal es el mejor conjunto de la segunda vuelta con 42 puntos en 20 encuentros

Marcelino entiende que la presión es implícita a la situación desde que cogió al equipo en enero. En la jornada 28º, antes de jugar ante el Córdoba, el Villarreal se encontraba a 11 puntos del segundo puesto. Desde Almería se juega la baza del vértigo que puede jugar en contra del Villarreal. Un año atrás, en la última jornada, al conjunto entrenado por Lotina en el último tramo, le bastaba con un empate en El Madrigal ante el Atlético de Madrid para mantener la categoría. En el minuto 86, Falcao hundió en la miseria al Villarreal.

Para Javi Gracia, que fue partícipe como jugador del segundo y último ascenso del Villarreal a Primera en la temporada 1999-2000 y que tres temporadas atrás entrenaba a su filial, el mensaje es calcado al de Marcelino. “Llevamos jugando finales varias semanas consecutivas y estamos preparados”. Y se aferra a las estadísticas. “Somos el equipo que más victorias [10] y más goles lleva como visitante [35]”. Enfrente el Villarreal, con diferencia el mejor conjunto de la segunda vuelta alcanzando 42 puntos en 20 encuentros, seis más que el Almería. Para Miguel Ángel Corona el Villarreal es el favorito. “Nadie tiene ninguna duda y si nos remontamos a principios de agosto, quizás hubiésemos pensado que en esta última jornada no se hubiesen jugado nada. Al final, han sufrido mucho, han conocido lo que es esta categoría y se la tienen que jugar en el último partido, en el que juegan en casa y les vale el empate”.

La idea es salir a ganar,  ante un buen equipo, experto y que juega al límite del reglamento Marcelino

La mente jugará un papel determinante. “Antes la presión la teníamos solo nosotros y ahora hay dos equipos que han llegado a estas alturas con la posibilidad de ascender. Y esta presión es igual para ambos”, argumenta Marcelino, que considera fundamental el apoyo de la afición. “Hemos atraído a la gente y todos juntos esperamos cerrar el ascenso”. En los últimos partidos del Villarreal, se ha visto en la grada de El Madrigal a Pellegrini, Capdevila, Diego López o Gonzalo Rodríguez, ilustres personajes amarillos dando su apoyo al equipo.

Las cartas están servidas. Decidirá el juego. “Debemos tener paciencia y no perder la cabeza en ningún momento. Podemos ganar el partido tanto en el primer minuto como en el último”, entiende Javi Gracia. “No vamos a cambiar nada. No tenemos nada que modificar. La idea es salir a ganar, ser superiores en el juego ante un buen equipo, experto y que juega al límite del reglamento”, advierte Marcelino. Todo se decidirá en 90 minutos que valen un ascenso.