Aranda se enfrenta a Ballesteros y Navarro tras el Granada-Levante

A sus 32 años, Carlos Aranda acumula una larga experiencia en el fútbol español, 12 temporadas entre Primera y Segunda División. Lo curioso del delantero malagueño es que, en poco más de una década, ha cambiado 11 veces de camiseta. Le cuesta arraigarse y, al parecer también consolidar amistades. Terminado el encuentro Granada-Levante (1-1) del pasado domingo, el delantero llegado al club nazarí en el mercado invernal procedente del Zaragoza, tuvo una trifulca, apoyado por su compañero Toño, con Ballesteros, Navarro e Iborra del Levante, teniendo que ser separados por las fuerzas de orden público según reflejó el árbitro, Gil Manzano, en el acta. El partido terminó con 14 cartulinas amarillas, uno de los mayores registros de amonestaciones en la historia de la Liga. En el 2009, entre Athletic y Racing recibieron 19 amonestaciones, dos de ellas rojas.

Para los psicólogos Aranda, habitual de los conflictos, sería una víctima de sus propias circunstancias. Su infancia no resultó sencilla y quedó marcada por el abandono de su padre y la muerte de su madre. El fútbol, le salvó.

El partido terminó con 14 cartulinas amarillas, uno de los mayores registros de amonestaciones en la historia de la Liga

La tensión del choque ante el Levante se palpaba en la víspera. Aranda se enfrentó a su compañero Iriney en la disputa de un balón. Apenas una temporada atrás, Aranda forzó su salida del Levante para enrolarse con el Zaragoza, del que también impuso su marcha el pasado diciembre para fichar por el Granada. Con el conjunto maño celebró con especial ahínco un gol en Copa en el Ciutat de Valencia. En el Nuevo Los Cármenes Aranda pinchó en hueso. Enfrentarse a Ballesteros o David Navarro, no resulta una cuestión menor. A sus 37 años, la larga hoja de servicios de Ballesteros cuenta con 114 cartulinas amarillas y 14 rojas a sus espaldas y algún que otro episodio oscuro. El más sonado resultó dos temporadas atrás cuando se encaró con Mourinho en el túnel de vestuarios del Ciutat de València en un partido de Copa. Llegado el descanso, Ballesteros, que no estaba convocado, se cruzó con Mourinho y requirió respeto para el Levante.

Navarro también presenta un controvertido expediente. Recibió una sanción ejemplar de la UEFA, un castigo de siete meses, tras un puñetazo a Burdisso, defensa argentino del Inter de Milán, tras finalizar un encuentro de Champions en la temporada 2007 en Mestalla entre el Valencia y el Inter. En la presente temporada, el pasado mes de noviembre, la ceja izquierda de Cristiano Ronaldo recibió el impacto del codo derecho de Navarro en el momento que el central trataba de elevarse para cabecear el esférico. "No tenía intención de hacerle daño", se disculpó Navarro de la acción en la que CR recibió cinco puntos de sutura. Aranda no eligió bien a sus contrincantes.