Alemania, un rival con el molde de España
Los de Rivera se miden hoy (19.00, Teledeporte) a la selección germana por un puesto en la lucha por las medallas
Para luchar por las medallas, España tendrá que mirarse primero un poco en el espejo. Mirar cuáles pueden ser sus defectos, porque sobre el parqué del Príncipe Felipe se bate con la selección que más se asemeja a ella. Una Alemania sin vedettes, de la que nadie esperaba nada y que aterriza en cuartos con la carta de presentación de haber sido el único equipo capaz de derrotar a la todopoderosa Francia.
Cuando hablas con los jugadores, todo son bromas. Y hacía muchos años que eso no pasaba” S. Kretzschmar, exjugador de Alemania
“Pensábamos que nuestro problema era que necesitábamos una estrella, una cara mediática, alguien que realzase el balonmano fuera y dentro de la pista”, confiesa Stefan Kretzschmar. Pero la solución, prosigue una de las leyendas del balonmano germano, venía por el lado opuesto: “Este equipo solo funciona cuando lo hacen todos a una, cuando juegan todos. Es increíble el buen ambiente que hay en la concentración. Cuando hablas con ellos, todo son bromas, entre los defensas, con el portero… Y hacía muchos años que eso no pasaba”, se felicita el exjugador, uno de los estandartes de la última gran generación de la Nationalmanncschaft.
Con toda la presión para España, Alemania se oxigena con la tranquilidad que te da no poder caer más bajo. Después de firmar un decepcionante undécimo puesto en el último Mundial, de quedar séptima en el Europeo del año pasado y no clasificarse para los Juegos de Londres, los germanos llegaban a este torneo con hasta seis jugadores que debutantes. “Les ha venido bien que no les incluyesen entre las favoritas. Al jugar sin tanta presión se han soltado un poco más”, explica el exinternacional Iker Romero, que milita en el Füchse Berlín, donde comparte vestuario con el guardameta Silvio Heinevetter.
Los germanos llegaban a este torneo con seis debutantes
“Es verdad que hemos de valorar a todos, analizar a más de uno. El peligro contra Serbia lo concretábamos en algunos jugadores, pero con los alemanes no puede ser, así que la preparación lleva más tiempo”, admite Valero. Después del partido tan perfecto que realizó el equipo ante Serbia, el técnico no quiere oír hablar de exceso de confianza. “Todo se puede mejorar”, insiste, a la vez que da especial relevancia a la presión que pueda ejercer la afición en Zaragoza. “Tenemos el peor rival y en la peor situación posible: jugar contra España, con todo el público a su favor, es obvio que nos perjudica”, considera Kretzschmar. Una ocasión para que España se tome la revancha del Mundial de 2007, en Alemania. Entonces ambos equipos se midieron en cuartos de final. Los anfitriones se llevaron el partido y, a la postre, acabaron en lo alto del podio.
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