La Bundesliga fascina a Guardiola

Pep Guardiola celebrará mañana su 42 cumpleaños como nuevo entrenador del Bayern de Múnich. El club alemán anunció ayer el acuerdo con el extécnico del Barcelona por tres años, hasta 2016. La noticia causó una relativa sorpresa, como acostumbra a ocurrir siempre que se trata del futuro de Guardiola, que el pasado verano no renovó contra pronóstico su contrato con el Barça y actualmente goza de un año sabático en Nueva York.

La residencia actual, y su afán por perfeccionar el inglés, le situaban el próximo curso en la Premier. Ante las muchas propuestas de que disponía, la duda parecía estar entre el Chelsea, que cada año mejoraba la oferta, y el Manchester City, club que cuenta con dos exazulgrana al mando: el director deportivo es Txiki Begiristain y el jefe ejecutivo es Ferran Soriano. La posibilidad del Manchester United se descartó y nunca sintió buena sintonía cuando le llamaron de Italia.

El interés del Milan precipitó la divulgación de la noticia. La entidad rossonera aseguró el lunes que Guardiola ya tenía un acuerdo prácticamente cerrado con el Bayern de Múnich. Así se confirmó ayer por la tarde, horas antes de que el Barcelona jugara ante el Málaga, después de que por la mañana reapareciera la posibilidad de que recalara en Inglaterra.

La FA TV recogía unas declaraciones de Guardiola, con motivo del 150 aniversario de la Federación Inglesa, donde expresaba su interés por la Premier: “Siempre encontré el fútbol inglés muy fascinante por su entorno, el ambiente y los aficionados. Como jugador no pude cumplir el sueño, pero espero tener la oportunidad en el futuro de ser entrenador, mánager o vivir la exigencia de todos los entrenadores y jugadores que han estado en Inglaterra”.

A la directiva del Bayern, de acuerdo con Guardiola, no le interesaba que aumentaran las especulaciones y respondió por la tarde con el anuncio de un acuerdo cuya estrategia se había diseñado a partir de la final de la Copa del Rey del año pasado, en Madrid, cuando un emisario del club alemán se entrevistó con personas vinculadas al entrenador. Las conversaciones progresaron durante el año, tanto en Nueva York como en Múnich, y finalmente el agente de Guardiola, Josep Maria Orobitg, viajó a Alemania poco antes de Navidad y se firmó el acuerdo.

El propio Guardiola informó entonces a la familia en Barcelona de su futuro en Alemania. Aunque el contrato es económicamente muy inferior al que le ofrecían los clubes ingleses, al extécnico del Barça le gusta la organización de la Bundesliga, seguramente el torneo europeo más saneado económicamente y que mayor afición convoca, y también la estructura del Bayern, cuyos dirigentes son exjugadores: Franz Beckenbauer (presidente de honor), Uli Hoeness (presidente), Karl-Heinz Rummenigge (presidente ejecutivo), Matthias Sammer (director deportivo) y el entrenador Jupp Henyckes, cuyo contrato expira el 30 de junio.

Guardiola, que siempre mostró su admiración por el club alemán, entiende que dispone de recursos suficientes para dar un nuevo estilo al Bayern de Múnich, cuya máxima aspiración es ganar su quinta Champions. También considera muy interesante la profesionalidad del club y la calidad de la plantilla, que cuenta con futbolistas como Neuer, Ribéry, Javi Martínez, Robben, Müller, Mario Gómez, Kroos, Lahm, Schweinsteiger... Las conversaciones que mantuvo con Hoeness y Rummenigge le permitieron constatar también que dispondrá de una buena cantera y de tiempo —tres años; en el Barça firmó por dos y renovaba una a una— para desarrollar sin intermediarios su proyecto. Y, por otra parte, está convencido de que la presión mediática es menor que la de otras Ligas y no tendrá que litigar diariamente con José Mourinho.

Los horarios de los partidos y el ambiente que se vive en los estadios, normalmente llenos, también han ayudado a Guardiola a tomar la decisión. Al técnico le preocupa la estabilidad familiar y entiende que en Múnich está garantizada, así como el aprendizaje de un nuevo idioma. Las conversaciones que tuvo en su día con Raúl, exjugador del Schalke, alimentaron su interés por Alemania. La mayor preocupación de Guardiola, en cambio, es organizar un staff a su medida después de que la mayoría de sus colaboradores permanezcan en el Barça, a excepción de Lorenzo Buenaventura y Manel Estiarte.

“Marcará el camino del club y del fútbol alemán”, proclamó Rummenigge después de anunciar el fichaje de Guardiola, ganador de 14 de 19 títulos con un estilo inconfundible en el Barça.