El Milan se retira de un amistoso por insultos racistas a sus jugadores
Kevin-Price Boateng, harto de los cánticos, decidió irse al vestuario y el resto de compañeros le secundaron
La plantilla del Milan ha decidido abandonar el partido amistoso que estaba disputando este jueves en campo del Pro Patria, club de la cuarta división del fútbol italiano, después de que una parte de la afición local profiriera insultos racistas contra jugadores del conjunto rossoneri.
El Milan explicó a través de su página web que Kevin-Prince Boateng, M'Baye Niang, Urby Emanuelson y Sulley Muntari fueron víctimas de cánticos racistas. En medio del partido y harto de los insultos, Boateng cogió el balón y lanzó un pelotazo en dirección al sector de la grada que estaba cantando. Posteriormente, abandonó el campo y sus compañeros le secundaron en la protesta.
El técnico del equipo rojinegro, Massimiliano Allegri, respaldó a su plantilla. "Ha sido correcto retirarse después de los insultos racistas. Es desagradable que esto ocurra, sobre todo por los aficionados, las familias y los chavales que vinieron a pasar una buena jornada. Prometemos al Pro Patria volver por estas personas, pero debemos dar una señal fuerte que sirva de ejemplo", reclamó el entrenador.
Boateng y sus compañeros también han encontrado el rápido apoyo de la directiva personificado en su director de organización, Umberto Gandini. "Estoy muy orgulloso de los jugadores del Milan que decidieron abandonar por los insultos racistas de unos pocos idiotas. ¡No al racismo, no a la estupidez!", ha escrito en su cuenta de Twitter.
El gesto de Boateng recordó a la amenaza de Samuel Eto'o hace siete años cuando vestía la camiseta del Barcelona. Durante un partido de Liga en La Romareda, el camerunés se hartó de los cánticos racistas y amenazó con abandonar el campo, aunque finalmente accedió a jugar el resto del encuentro.
Pato, al Corinthians por 15 millones
La aventura europea de Pato ha abierto de momento un paréntesis. El delantero del Milan, de 23 años, ha fichado por el Corinthians, según anunció anoche el club italiano. El equipo brasileño, reciente campeón del Mundial de Clubes ante el Chelsea, pagará por Pato unos 15 millones de euros, lo que le convierte en el fichaje más caro en la historia del fútbol brasileño.
Pato abandona el Milan, al que llegó en 2007, sin haber triunfado plenamente en Europa, y cuando tenía más que nunca un papel secundario. En la pasada temporada solo disputó 11 partidos, y cuatro en el presente curso, y ha arrastrado varias lesiones. Lejos parece quedar aquel gol a los 23 segundos en el Camp Nou (2-2) en septiembre de 2011, uno de los tantos más rápidos en la historia de la Champions.
Pato, que vuelve a Brasil (ya jugó dos años en el Internacional de Porto Alegre) se ha asegurado un suculento contrato en el Corinthians, según el cual disfrutará además de buena parte de sus derechos de imagen, así como de un porcentaje de un futuro traspaso a otro club.
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