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Vettel aguanta a Alonso y lo que le echen

El alemán parte del ‘pit-lane’ y acaba tercero para mantener 10 puntos de ventaja sobre el español, que acaba segundo Raikonnen se impone en una carrera tres años después

Vettel, a la izquierda, saliendo desde el 'pit-lane'.
Vettel, a la izquierda, saliendo desde el 'pit-lane'. TOM GANDOLFINI (AFP)

Para Kimi Raikkonen el Gran Premio de Abu Dabi fue un sueño convertido en realidad. Demostró que su coche funcionaba en la clasificación del sábado y en carrera se vio líder tras 19 vueltas, cuando el McLaren dejó tirado sin potencia a Lewis Hamilton en la cuneta, condición que ya no abandonó hasta el final. A sus 33 años y tras dos de ausencia del Mundial, Raikkonen ganó su carrera 19ª, la primera desde 2009 en Bélgica, cuando todavía pilotaba para Ferrari. Lotus lo celebró a lo grande. Incluso los más optimistas comenzaban a pensar que tenían coche para ganar, pero que probablemente se quedarían en blanco este año. La victoria de Raikkonen no tapó en absoluto la excelente carrera que realizó Alonso, segundo, ni la impresionante remontada de un Vettel que partió desde el pit-lane y acabó en tercera posición, acabando con la leyenda de que el alemán era incapaz de soportar la presión cuando salía desde atrás.

Clasificación del Gran Premio de Abu Dabi de fórmula 1

1. Kimi Raikkonen (FIN/Lotus): 1:45:58.667
2. Fernando Alonso (ESP/Ferrari) +00:00.852
3. Sebastian Vettel (ALE/RedBull) +00:04.163
4. Jenson Button (GB/ McLaren) + 00:07.787
5. Pastor Maldonado (VEN/Williams) + 00:13.007
6. Kamui Kobayashi (JAP/Sauber) + 00:20.076
7. Felipe Massa (BRA/ Ferrari) + 00:22.896
8. Bruno Senna (BRA/Williams) + 00:23.542
9. Paul Di Resta (GB/Force India) + 00:24.160
10. Daniel Ricciardo (AUS/T.Rosso) + 00:27.463
11. M. Schumacher (ALE/Mercedes) + 00:28.075
12. J. E. Vergne (FRA/T.Rosso) + 00:34.906
13. H. Kovalainen (FIN/ Caterham) + 00:47.764
14. Timo Glock (ALE/Marussia) + 00:56.473
15. Sergio Perez (MEX/Sauber) + 00:56.768
16. Vitaly Petrov (RUS/Caterham) + 01:04.595
17. Pedro de la Rosa (ESP/HRT) + 01:11.778

La carrera se convirtió en una locura desde el primer momento. Ver a Vettel en la última posición –tras ser sancionado por acabar la clasificación sin un litro de gasolina- era un lujo para Alonso, que ya en la salida lanzó su primer ataque y avanzó hasta la cuarta posición antes de concluir la primera vuelta. Webber y Button quedaban atrás. Por delante, Hamilton mantuvo con solidez la primera posición, perseguido por Raikkonen, Maldonado y Alonso. Sin embargo, el principal foco de atracción estaba detrás, en la lucha que mantenía Vettel por entrar en los puntos y avanzar puestos rápidamente.

En solo cuatro vueltas, Vettel era ya el 14º. Y cuando Rosberg arrolló literalmente a Karthikeyan (9ª vuelta), Vettel era ya 12º y estaba a 23 segundos de la cabeza. La entrada del coche de seguridad permitió a Vettel situarse a solo 9,5 segundos del líder. Pero una frenada inesperada de Ricciardo para calentar mejor neumáticos obligó a Vettel a realizar una brusca maniobra en la que se llevó un anuncio por delante. Su alerón delantero, ya tocado por un adelantamiento, quedó más afectado y ello le obligó a entrar en el taller. De tener casi asegurados los puntos, pasó a ocupar la 22ª y última posición, y de 9,5 segundos a 12,8. Aquello fue como volver a empezar. Un descalabro.

La apuesta de Vettel por los neumáticos blandos fue todo un acierto

Sin embargo, aquella circunstancia que parecía irremediable resultó ser un acierto estratégico de gran nivel, una carambola que le permitió al final mantener el liderato del Mundial a falta de dos carreras. El cambio de neumáticos que realizó (puso blandos) en la vuelta 13ª, le permitió rodar más rápido que todos los demás e ir adelantando a sus rivales con cierta comodidad. Después el abandono de Lewis Hamilton que perdió toda la potencia de su coche, le favoreció también. Tras partir desde la última posición de nuevo en la 14ª vuelta, Vettel se encontró, gracias a los repostajes, detrás de su compañero Webber y de Massa cuando transcurría la 22ª.

Entonces, Webber y Massa se tocaron –Massa perdió el control- y Vettel pasó a ocupar la séptima posición. Cuando Alonso y Raikkonen entraron a cambiar neumáticos, Vettel llegó incluso a liderar la carrera. Pero el piloto de Lotus recuperó la cabeza al salir del taller. Durante varias vueltas, pareció que Vettel podía aguantar hasta el final. Pero las pérdidas de tiempo en relación a Alonso hicieron patente que debía regresar al taller. Lo hizo en la 37ª vuelta y regresó ¡4º! Un milagro, una carambola prodigiosa para el alemán, que en las vueltas finales intentó incluso adelantar a Button. Le adelantó a tres vueltas del final para acabar tercero.

Hubo siete abandonos, muchos accidentes, el coche de seguridad. De todo. El Mundial sigue muy vivo

Aquella remontada acaparó la atención. Pero por delante, la carrera cambió de decorado a partir del abandono de Hamilton. En aquella misma vuelta, Alonso adelantó con RDS a Maldonado y se colocó en segunda posición por detrás de un Raikkonen, que parecía haber puesto la directa hacia la victoria. Estaba claro que la lucha por el triunfo la dirimirían al final estos dos pilotos. Alonso fue recortando diferencias hasta situarse a 1,4 segundos de Raikkonen a falta de tres vueltas. Era una lucha a muerte. Pero pasara lo que pasara, estaba claro que Vettel había roto todos sus tabúes, había sabido luchar por sus opciones desde el fondo de la parrilla, había demostrado que era capaz de remontar y había sumado los puntos necesarios para mantenerse líder del Mundial. Una carrera genial.

Pedro de la Rosa, por su parte, acabó la carrera, pero lo hizo en última posición, 17º. Hubo siete abandonos, muchos accidentes, el coche de seguridad. De todo. Y ello permitió al de Cardedeu uno de sus mejores resultados. El Mundial sigue muy vivo.

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