La peor pretemporada en la historia de los Lakers

Si los partidos de pretemporada sirven para que los jugadores se aclimaten al ritmo de competición y para que los fichajes se integren en el equipo antes de comenzar la temporada, a los Lakers les queda una larga travesía. La NBA comienza el próximo martes, y los de Los Ángeles llegan batiendo un récord histórico: su derrota de esta madrugada ante los Kings de Sacramento (94-82) completa un pleno: han perdido los ocho encuentros de pretemporada que han disputado. Estos resultados les convierten en el peor equipo de la NBA, a pesar haberse hecho este verano con los servicios de Steve Nash y Dwight Howard, que completan una plantilla de lujo junto a Bryant, Gasol o World Peace.

La franquicia de Sacramento se ha impuesto por tercera vez consecutiva a la de Los Ángeles para completar la mala racha de los Lakers, que nunca en su historia habían perdido todos los juegos previos al curso. Compaginar el talento de Nash y de Howard se le está atragantando al técnico angelino, Mike Brown. La ausencia del escolta Kobe Bryant por una lesión en su pie derecho que sufrió en un partido del pasado domingo pudo incidir en la mediocridad de su equipo, pero no sirve para explicar el pobre juego que puso en práctica una franquicia llamada este año a conquistar su decimoséptimo anillo.

La base del renovado quinteto titular está llamado a ser el ex de los Phoenix Suns Steve Nash. Ante los Kings, el sudafricano jugó 15 discretos minutos que no sirvieron para que uno de los jugadores más determinantes bajo los aros de la NBA, Dwight Howard, consiguiese buenos registros. Howard, que saltaba a la cancha por segunda vez con la camiseta de oro y púrpura, después de seis meses de inactividad por una operación en la espalda, se anotó nueve puntos, ocho rebotes y una asistencia en 24 minutos.

La estadística dice que no hay equipo que haya llegado a las finales perdiendo todos los encuentros de preparación

El español Pau Gasol también ofreció una actuación discreta: siete puntos y cuatro rebotes en casi media hora de juego. Esto snúmeros llevaron a los de California a un 42 por cierto de acierto en los tiros de campo. Solo el alero Devin Ebanks llegó a los dos dígitos, con 14 puntos. Enfrente, el pívot DeMarcus Cousins lideró a los de Sacramento y rotuló un doble-doble con 20 puntos y 13 rebotes.

La recuperación de Bryant se muestra más que nunca esencial para la temporada regular, que se inicia para los Lakers el próximo martes ante los Mavericks de Dallas. Las estadísticas muestran que ningún conjunto que haya perdido todos los encuentros de preparación haya llegado siquiera a las finales. Algo impensable para unos Lakers creados para imponerse a todos y a que ahora solo pueden mejorar.