_
_
_
_

La ‘quinta columna’ de Lezama

Una web publica una charla de Bielsa a sus futbolistas que supuestamente algún jugador grabó

Bielsa, desolado tras uno de los goles del Sparta
Bielsa, desolado tras uno de los goles del SpartaPetr David Josek (AP)

La caja de sorpresas del Athletic tiene un aire de Pandora. Inagotable. La última sorpresa, sin embargo, ha sido escandalosa. Alguien, presumiblemente un futbolista o un exfutbolista del Athletic, grabó la charla de Marcelo Bielsa a sus jugadores en lo que era solamente una reflexión educada y sensata sobre lo ocurrido (la pérdida de dos finales consecutivas: la de la Liga Europa, ante el Atlético, y la de la Copa del Rey, ante el Barcelona, ambas por idéntico resultado: 3-0) y una posible despedida porque aún no se había concretado la renovación de su contrato. La grabación fue publicada ayer por la web El Desmarque Bizkaia, justamente cuando Bielsa acababa de apagar el fuego creado por la situación con Llorente, expulsado el lunes del entrenamiento y redimido por el técnico, que entonó su mea culpa.

La única mueca de desacuerdo de Bielsa con su plantel está referida, según la grabación, a algunas risas que se producen durante su alocución. “Se permiten reírse después de ver que hay tipos que vienen caminando de Madrid (...) y nosotros estamos arriba de un colectivo riéndonos después de haber perdido una final”, reprocha a sus futbolistas

“Se permiten todas esas cosas, pero ni el fútbol ni la vida son así muchachos. Va a pasar muchísimo, pero muchísimo tiempo, para que tengan revancha. Y se van a acordar de esto que les estoy diciendo. Y les insisto: no se trata de haber ganado, sino de cómo perdimos”, se lamenta Bielsa en una reflexión final sobre la mejor campaña del Athletic en varias décadas.

“Se permiten reírse después de haber perdido una final”, dice el técnico a sus jugadores en la charla

El técnico, en un tono siempre educado, reconoce lo conseguido. “Para mí, todo el tránsito, que fue extraordinario porque jugaron partidos verdaderamente extraordinarios, lo opaca esto y más lo opaca el no saber por qué. Porque la realidad, muchachos, es que no sabemos por qué. A mí no me alcanza con decir que las conclusiones del primer partido [se refiere a la final de la Liga Europa, en Bucarest] fueron que estábamos demasiado nerviosos, que... Todas las que ustedes atribuyeron. Yo, si me preguntan por qué, peor todavía, no sabría por qué. Bueno, nada más, muchachos. Los saludo por si no nos volvemos a ver. Y, si nos volvemos a ver, lucharemos por seguir produciendo algo importante”.

La pregunta que aletea en el entorno del club rojiblanco no es sobre lo que dijo Bielsa, que no es sino una reflexión global que todo el Athletic se hizo y se sigue haciendo, sino cómo algún jugador (en el vestuario se supone que solo estaban los técnicos y los jugadores) decidió grabar la alocución (se supone que no para estudiarla dialéctica y gramaticalmente) y por qué se filtra ahora, tras sofocarse el incendio con Llorente y el día en que el Athletic jugaba un partido crucial en Praga. El club, no obstante, sigue mudo en plena tormenta.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_