El rey del desmarque llega a Getafe

Ángel Torres lo tiene claro. “En el Mundial de 2014, Álvaro será el delantero de la selección”. El presidente del Getafe hace tiempo que le había echado el ojo a una de las mayores promesas del fútbol español. El canterano del Espanyol, Álvaro Vázquez (Badalona, 1991) llega a Getafe a hacer la mili. A madurar y curtirse en Primera a base de minutos y, con apenas dos entrenamientos con el equipo, este sábado debutará en el Coliseum ante el Barcelona —que llegará al escenario donde conoció su primera derrota el curso pasado con las bajas de Iniesta y Alexis, lesionados con sus selecciones—.

“Álvaro tenía muchas novias y si el presidente no hubiese estado listo y rápido, el jugador no estaría aquí”, presume el secretario técnico azulón, Toni Muñoz. El canterano, que había denunciado a su club por impago, renunció a renovar su contrato, que acababa en 2013, y era pretendido por media docena de clubes de Primera. Torres tomó la delantera en la puja aprovechando la deuda que el Espanyol tenía con el Getafe por el traspaso de Albín y ha terminado por hacerse con el jugador por dos millones de euros, una vez descontada la pella. “Getafe era el mejor sitio para crecer. Era una oportunidad única para demostrar que puedo valer para esto”, cuenta Álvaro.

Pochettino le hizo debutar en Primera en el Bernabéu con 19 años. Diestro, con buen porte —1,82m, 76kg— y un 44 de pie, creció con Tamudo y Osvaldo como referentes y se presentó en sociedad a lo grande logrando la bota de plata —cinco goles en cinco partidos— en el Mundial sub-20 de Colombia del año pasado.

En Getafe se frotan las manos con su fichaje. “Nos viene al pelo para nuestro juego. Tenemos grandes jugadores en la segunda línea que ven el pase con claridad y Álvaro es el rey del desmarque. Es muy peleón y además tiene gol”, resume su compañero Moyà.