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“Estoy preparado para el Armagedón”

A sus 38 años, el piloto Colin Edwards es un auténtico texano y está de vuelta de todo. Quizá por eso fuera el primero en lanzarse a la aventura de las CRT

Nadia Tronchoni
Colin Edwards, en el circuito de Laguna Seca.
Colin Edwards, en el circuito de Laguna Seca.PAUL BUCK (EFE)

Colin Edwards (Houston, EEUU; 38 años) es un auténtico texano y está de vuelta de todo. Quizá por eso fuera el primero en lanzarse a la aventura de las CRT aunque haya terminado hablando de la Suter con su habitual lenguaje plagado de insultos. Vive desde hace cinco años en la casa de sus sueños: en un lago en el norte de Houston. Y tiene una pick up, “la más grande que uno se puede comprar”, y también un Mustang del 67, “con 740 caballos de potencia”, alardea.

Pregunta. ¿Qué se compró con el primer dinero que ganó?

Respuesta. Diría que me compré una casa. Ahorré lo que había ganado para comprarla. Desde los 15 vivía con mi hermano y a los 18 la compré.

P. Si no hubiera sido piloto de motos, sería...

R. ¿Un gigoló? No lo sé. No puedo responder a eso. He pasado mi vida en moto.

P. ¿Qué piloto le ha dado más codazos?

R. Probablemente, Carl Fogarty. Hace años tuvimos mucho de eso, de codazos. Pero yo también le daba. Era divertido.

P. ¿Ser padre no le ha hecho aflojar sobre la moto?

R. Me casé en 1999. Y gané mi primer campeonato del mundo de Superbike en el 2000. En el 2002 supe que mi mujer estaba embarazada y gané otra vez el título aquel año. Así que creo que no pienso en ello cuando me subo a la moto. Es extraño: cuando te pones el casco y el semáforo se apaga, no piensas en nada más. Solo se trata de dar gas a tope.

P. ¿Sería capaz de montar su moto pieza por pieza?

R. Sí, ningún problema. Sé cambiar la caja de cambios y todas esas cosas. Si tengo a alguien por detrás, controlando que lo voy haciendo bien, mejor, pero soy capaz.

P. Sabía que las CRT no serían competitivas, ¿de qué se sorprende?

R. Yo tenía una oferta para irme a Superbike y preferí quedarme aquí para ver cómo progresan las CRT. No me decidí por el dinero, sino pensando en el futuro de este deporte. Pero no he sido totalmente consciente hasta ahora de que no tengo ninguna posibilidad de ganar.

P. 11 años en MotoGP, ¿Cómo hace para que le queden ganas?

R. No lo sé. Se trata de tener motivación. Y especialmente ahora, con la electrónica y los motores de cuatro tiempos, las motos son más fáciles de pilotar que las de dos tiempos. Así que mientras exista la motivación y no pienses en tus hijos o en si te vas a hacer daño, sí, te quedan ganas de subir a la moto. Si no, es mejor irse para casa.

P. ¿Cómo ha cambiado en estos 10 años?

R. Esto es muy diferente a los tiempos de Kenny Roberts. Aquello de bajarse de la caravana y subirse a la moto ya pasó. Hay mucho más dinero, y cuanto más dinero hay por medio, más político es todo. Ocurre en todos los deportes. Así que, como pilotos, no nos queda más que aceptar el trato.

P. ¿Sabe quién era Leslie Graham?

R. No. ¿Quién?

P. ¿Quién fue el campeón de MotoGP en 1974?

R. ¿Agostini?

P. ¿Caza o pesca?

R. Las dos. Diría que la caza. Me encanta. Tengo un montón de escopetas, me divierto con ellas. Pero también me gusta mucho pescar.

P. ¿Cuántas armas tiene?

R. Diría que tengo unas 15 pistolas y una veintena de rifles. Las tengo en un lugar seguro... Estoy preparado para el Armagedón. (Ríe).

P. ¿Cuál es la película que más veces ha visto?

R. La mejor película de todos los tiempos, El gran Lebowski.

P. ¿Tiene animales domésticos?

R. Sí. Tres perros: un bulldog inglés, un bulldog francés y un labrador, que es un salvaje, le gusta comer pájaros.

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Sobre la firma

Nadia Tronchoni
Redactora jefa de la sección de Deportes y experta en motociclismo. Ha estado en cinco Rally Dakar y le apasionan el fútbol y la política. Se inició en la radio y empezó a escribir en el diario La Razón. Es Licenciada en Periodismo por la Universidad de Valencia, Máster en Fútbol en la UV y Executive Master en Marketing Digital por el IEBS.

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