Cesc vuelve a jugar de falso '9' y Francia revoluciona las bandas

Tras un partido en el que Cesc actuó de falso 9, donde el equipo tuvo posesión pero le faltó ruptura y oportunidades de gol frente a Italia (1-1), Del Bosque decidió virar el equipo y dar cabida a un delantero centro, a Torres. Funcionó el ariete ante Irlanda (4-0) con dos goles y se encasquilló un tanto el equipo ante Croacia (1-0), solo resuelto el lío con un pase de Iniesta y un remate de Navas, revulsivo del encuentro. Pero el seleccionador, fiado a sus ideas, repite con el 9 mentiroso, con Cesc como falso ariete.

Con Casillas bajo los palos, Arbeloa y Jordi Alba cubrirán los laterales de la retaguardia con la exigencia de subir de vez en cuando, puesto que casi todo el juego de España transcurre por el interior. En el eje de la defensa, de nuevo Piqué y Ramos deberán dar salida al juego. En la medular, Xabi Alonso y Busquets repartirán el cuero y tratarán de cortar la iniciativa del rival, además de enlazar con la siguiente línea, donde Silva, Xavi e Iniesta tendrán la responsabilidad de dar el último pase o aparecer de la segunda línea para rematar. Arriba, en solitario, Cesc se retará con el gol, además de pelearse con los centrales galos.

Blanc, sin embargo, sí que ha hecho una pequeña revolución en su equipo, al igual que hicieran Croacia e Italia, siempre con la idea de retener a los extremos españoles y, de paso, atacar por los flancos, toda vez los interiores de España siempre tiran hacia dentro y dejan un tanto descuidada la banda. Así, Blanc ha decidido adelantar a Debuchy al medio para dar el lateral a Revelliere. Y, en la izquierda, actuará Malouda de volante y Ribéry por la banda. Las bajas, entonces, son Nasri y Diarra.

España: Casillas; Arbeloa, Ramos, Piqué, Alba; Xabi Alonso, Busquets; Silva, Xavi, Iniesta; y Cesc.

Francia: Lloris; Revelliere, Rami, Koscielny, Clichy; Cabaye, M’Vila, Malouda; Debuchy, Benzema y Ribéry.