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Los ‘trillizos’ de Portugal

Bento cuenta con un trío poderoso en la línea divisoria: Veloso-Meireles-Moutinho

Ramon Besa
Cracovia (Polonia) -
Moutinho salta ante Van Persie durante el partido de Portugal ante Holanda.
Moutinho salta ante Van Persie durante el partido de Portugal ante Holanda.Ian Walton (Getty Images)

La mayoría de los seleccionadores, como el croata Slaven Bilic, sostienen que para ganar la Eurocopa se necesita un equipo que tenga “ritmo de juego, esté bien físicamente y, sobre todo, tenga hambre”. Si la ambición es la mayor de las condiciones, uno de los aspirantes al título es Portugal por su manifiesta competitividad y voracidad. Paulo Bento ha montado un conjunto interesante, capaz de tutear a Alemania y eliminar a Holanda, y dispone del que está llamado a ser el futbolista del torneo, Cristiano Ronaldo, aspirante también a destronar a Messi como Balón de Oro después de marcar 59 goles con el Madrid. Los focos de la televisión se posan sobre las áreas para seguir a CR y Nani y también a Bruno Alves y Pepe. Portugal tiene defensa, excelentes atacantes y un portero correcto.

La duda está en la línea divisoria. A veces, da la sensación de que los tres centrocampistas que se reparten de forma equitativa y solidaria esa zona, Veloso-Meireles-Moutinho, son idénticos o muy parecidos, como si fueran tres mediocentros. No se sabe si es una cosa buena o mala. Hay quien le ve una ventaja y quien le ve un problema. A la vista de los clásicos, a Portugal le faltaría el volante que marca las diferencias, el 10 de toda la vida, la figura que en su día mostraron Deco o Rui Costa. Algunos modernos consideran, en cambio, que la jerarquía y el liderazgo se ejerce de forma colectiva en un equipo cuya capitanía recae en Cristiano.

Tienen características muy parecidas. Unos lo ven como una ventaja. Otros, como un problema

Moutinho es un jugador ya contrastado, formado en el Sporting y mejorado en el Oporto, y se sabe que Meireles responde al centrocampista box to box por sus actuaciones en el Liverpool y el Chelsea. Ambos han venido jugando con asiduidad en la fase clasificatoria con Bento después de que saliesen de la formación Fernandes, Tiago y hasta Danny. La sorpresa ha sido Veloso, que irrumpió en la eliminatoria de repesca contra Bosnia y ha ocupado la plaza de Martins, cuya lesión acabó con el imperio de Las Tres Emes, como se conocía en Portugal al trío Martins-Meireles-Moutinho.

Hijo de futbolista, Miguel Veloso es uno de tantos productos de la factoría del Sporting. Antes lateral zurdo y mediocentro, respondería al perfil del 6 clásico. Jugador actualmente del Génova y con poco recorrido internacional —un partido en la Eurocopa de 2008—, se ganó la titularidad en los partidos disputados contra Bosnia. Moutinho sería el 8 perfecto, que puede jugar en cualquiera de las puntas del rombo, como ya hizo en un partido en el estadio Alvalade, por su versatilidad. Volante universal, con un gran sentido de equipo y de la responsabilidad —sustituyó a Sa Pinto como capitán del Sporting a los 19 años—, tiene clase y es inteligente y creativo. Y Meireles es un medio de gran recorrido, agresivo y que siempre da bien al balón de primeras. Sin embargo, difícilmente completa los 90 minutos de un encuentro.

Nuestro secreto está en la buena organización" Raúl Meireles, jugador de la selección portuguesa

Bento ha repetido la alineación en los tres partidos y se sospecha que a la selección le pasará factura, especialmente a los centrocampistas, un trío poderoso y trabajador en la defensa de su campo, porque no cuentan con la colaboración de los delanteros, muy ofensivos. Ausente Fernandes, la mejor alternativa y el medio diferente es Hugo Viana, excelente por sus cambios de orientación y su capacidad de pase, pero poco intenso y más apto en un 4-2-3-1 que en el actual 4-3-3. Y no parece que Bento vaya a tocar nada porque las cosas funcionan. “Nuestro secreto está en la buena organización”, advirtió Meireles.

A Portugal le ha valido hasta el momento con Veloso-Meireles-Moutinho, expertos en el fútbol de transición defensa-ataque y se supone que menos preparados para la elaboración y la creación. Al equipo, a veces, le faltan puntas de juego y no se sabe cómo responderá cuando precise un jefe capaz de revertir las cosas y dar un nuevo registro o un matiz diferente. El nudo del asunto está en que con tanto equilibrio nadie desequilibra en la medular, de ahí la importancia de Cristiano. “A nosotros ya nos va bien que no nos consideren favoritos. Soy campeón de Europa con el Chelsea cuando nadie nos daba por favoritos...”, recordó ayer Meireles.

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Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

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