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fórmula 1 | GP de Canadá

“Nadie ganará el Mundial en la séptima carrera pero algunos ya comienzan a perderlo”

Alonso defiende la valentía demostrada por Ferrari y justifica su quinto puesto a partir de la “inesperada degradación” de los neumáticos

Oriol Puigdemont
Alonso, en su garaje durante la tercera sesión de entrenamientos en Canadá.
Alonso, en su garaje durante la tercera sesión de entrenamientos en Canadá.Chris Wattie (reuters)

 El fin de semana se le terminó torciendo en Montreal a Ferrari y a Fernando Alonso, su principal apuesta de cara a recuperar la corona que se le resiste desde 2007. El viernes y el sábado, durante las sesiones de ensayos, tanto las libres como la cronometrada, el F2012 fue uno de los prototipos más consistentes y rápidos, confirmando aquello que comenzó a adivinarse en Montmeló, la primera cita europea del calendario: que la Scuderia ha encontrado una línea de desarrollo del bólido rojo con mucho recorrido por delante. La carrera, no obstante, evidenció que los técnicos de la marca de Maranello metieron la pata con la estrategia, al dejar al español en la pista hasta que las gomas de su coche terminaron por desplomarse. Alonso arrancó el tercero, lideró la prueba, circuló el segundo la mayor parte del tiempo y al final cruzó la meta el quinto, superado sin remedio por Hamilton, Grosjean, Pérez y Vettel. El alemán circulaba detrás de él y tuvo tiempo de meterse en el taller una segunda vez para colocar un juego de gomas nuevo (vuelta 63), volver a salir a la pista y adelantarle en la penúltima vuelta.

Nada más bajarse del coche, Alonso defendió tanto como pudo la valentía demostrada por los técnicos que le dirigían desde el muro, por más que el resultado final dejara al descubierto un error imposible de enmascarar. “Prefiero jugármela a tratar de ganar carreras 19 veces antes de terminar en el podio porque mis ruedas han durado unas vueltas más que las del resto. Nosotros tomamos la decisión de ir a ganar la carrera y no nos salió bien. Pero no por la estrategia sino por la degradación”, arrancó Alonso. “Cuando Hamilton entró por segunda vez, decidimos jugárnosla. Ahora es fácil decir que nos equivocamos, pero de haber hecho lo contrario, podríamos haberle servido la victoria a Vettel”, prosiguió el asturiano, delante de los periodistas, en un discurso que después repitió en Twitter: “Antes de que nadie se haga el lío: ha sido inesperada la degradación [de las gomas] al final. Pero la estrategia, sin duda, era ganadora. Como la de Grosjean o Pérez”.

El bicampeón con Renault (2005 y 2006) llegó a Canadá con la batuta del Mundial en su zurrón, y afrontará la próxima cita, en Valencia y delante de su gente, a solo dos puntos de Hamilton. “Nadie ganará el Mundial en la séptima carrera, pero algunos ya empiezan a perderlo poco a poco. Al final hemos sumado más puntos que Button y Kimi”, añadió.

Stefano Domenicali, por su parte, tuvo menos reparos en reconocer el fallo. “Hoy cometemos dos errores: no cubrir a Vettel en su segundo cambio de neumáticos y el trompo de Felipe (a las primeras de cambio). Después de este análisis preliminar, debemos extraer una lectura global, de campeonato. Fernando está a solo dos puntos del liderato, y el F2012 ya vuelve a ser competitivo como para pelear por las victorias con los mejores”, desgranó el ejecutivo de los bólidos de Il Cavallino Rampante.

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