“Yo voy a continuar”

José Mourinho, el hombre que hace un año, tras ser eliminado en semifinales de la Champions, descargó toda su ira sobre la UEFA denunciando una conspiración para adulterar la competición, se mostró apagado tras caer otra vez en la misma ronda. Lo primero que pronunció fue un llamamiento a la deportividad: “Hay que ser equilibrados en la victoria y en la derrota”.

Calmado, casi difuso, se explayó cuando le preguntaron cómo se sentía. “Lo primero que pienso es que para un equipo es difícil llegar a dos semifinales en dos años y para un entrenador es difícil llegar a seis en ocho años”, declaró. “Creo que merecimos ganar. Los dos partidos contra el Bayern han sido muy igualados. Pero cuando se llega al 2-1 es muy difícil jugar. Los jugadores saben que no pueden errar. Están bajo una presión altísima. La gente que marca es la que tiene los huevos para ir a tirar los penaltis. Los que no son egoístas. Los que no piensan en sí mismos y anteponen el equipo. Imagino que después de la tristeza que sufrieron los pseudomadridistas el último sábado ahora se llevarán una alegría”.

Mourinho justificó su labor en el pasado y explicó que su táctica conservadora contra el Bayern fue un producto de los nervios de los jugadores, más que de sus consignas. Su capitán, Casillas, dijo que la eliminatoria se les había escapado por especular con el 2-0 pero Mourinho no respondió a esta cuestión y habló del cansancio físico.

“Que Cristiano y Kaká fallen sus penaltis se explica del mismo modo que los mejores tenistas del mundo fallan un match ball, y los pilotos de fórmula uno hacen errores a dos vueltas para el final. Son superhombres. ¡Pero atentos! Porque eso es una película. Me entristece tanto que la gente no olvide que Messi falló un penalti decisivo, y que ahora tres jugadores nuestros hayan fallado. El fútbol es esto. Ellos son los mejores. Pero hay gente que critica y que se cuestiona por qué razón se falla. Es gente que si vive en el segundo piso y van por las escaleras llegan arriba muertos, así es que siempre van por ascensor. Estos tíos están dos horas corriendo como animales, con una tensión increíble y llegan a esto y fallan. Ahora la Champions la va a ganar el quinto de la Premier o el segundo de la Bundesliga. Antes de estas semifinales Barcelona y Madrid se jugaron el partido más importante de la Liga española. El Bayern ha ganado. Ha tenido más suerte que nosotros”.

“Es difícil llegar a dos semifinales en dos años y a seis en ocho como entrenador”

“Absolutamente”, respondió el técnico cuando le preguntaron si le apetecía seguir dirigiendo al Madrid el año que viene para llevarlo a una final de la Champions. “Si tengo una cosa en mi cabeza era ganar con esta gente. Ganar la Copa el año pasado ha tenido un significado para el club y para nosotros. Si conseguimos ganar el campeonato será fantástico. Queremos más. Mi sensación es que el grupo tiene todavía un espacio grande para crecer y el club también”.

Mourinho concluyó pronunciando su viejo discurso sobre la modernidad, dando a entender que el Madrid es una institución anticuada que él mismo puede conducir al futuro. “Los clubes se tienen que adaptar a la evolución de los tiempos”, comentó. “Un coche fantástico de los años 80 no es lo mismo que un coche de los 90 y 2000. Las mentalidades tienen que cambiar poco a poco con dedicación y empatía. Si el club y los chicos, y mi sensación es que sí, creen que puedo aportar algo más, yo voy a continuar. La empatía entre nosotros crece día a día”.