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Al Chelsea no le van las segundas partes

El conjunto inglés recibe el 68% de los tantos después del descanso

Petr Cech y Gary Cahill tratan de impedir el gol de Robin Van Persie en un partido entre el Arsenal y el Chelsea.
Petr Cech y Gary Cahill tratan de impedir el gol de Robin Van Persie en un partido entre el Arsenal y el Chelsea.Sang Tan (AP)

El Chelsea no es equipo de segundas partes. Los blues se han caracterizado por ser un equipo rocoso, muy solvente en defensa, ya desde que José Mourinho se hiciera cargo del equipo en 2004. No es extraño, porque John Terry ha estado ahí desde el año 2000 y junto a él han desfilado algunos de los mejores zagueros del mundo: desde Carvalho a David Luiz, pasando por Alex e Ivanovic, todos acreditados centrales, normalmente contundentes y expeditivos. Además, el equipo londinense ha contado con uno de los mejores porteros, el checo Petr Cech. Pero el tiempo pasa y la defensa del Chelsea ya no impone como antes. Y menos, al final del partido. El equipo de Di Matteo (antes de André Vilas-Boas) ha recibido 26 de los 38 tantos encajados en la Premier League en la segunda parte. El 68% de los goles los ha sufrido a la vuelta del descanso.

La sangría de goles postreros le ha costado puntos y sustos. Valen como ejemplo tres de los últimos cuatro partidos ligueros, descontado el empate a cero ante el Arsenal: el encuentro ante el Aston Villa discurría con un plácido 0-2, hasta que Collins (minuto 77) y Lichaj (80) empataron el partido. Ivanovic anotó su segundo tanto en el 83 y Torres maquilló el resultado al final (92). Entonces fue solo un susto. En el siguiente encuentro, ante el Wigan, otro: 0-1 hasta que Diame empata en el 82. Un gol de Mata en el tiempo añadido le dio los tres puntos al Chelsea. Ante el Fulham, ya no tuvo tiempo de enmendar el gol de Dempsey, que empató el encuentro en el 82.

El equipo blue encaja más tantos que nunca en los cinco últimos años en la Liga inglesa

El Chelsea encaja más tantos que nunca en los últimos cinco años en la Liga inglesa. En la temporada 2007-08, al equipo del israelí Avram Grant le hicieron 26 goles (0,68 de media). En la siguiente, dirigida por Luis Felipe Scolari y por Guus Hiddink, 24 (0,63). Con Ancelotti, el listón defensivo se bajó, y el equipo recibió 32 y 33 goles en las temporadas 2009-10 y 2010-11, respectivamente. Poco, en comparación con lo ocurrido esta temporada, cuando a falta de cuatro partidos por disputar ya ha encajado 38 goles. El problema se agrava cuanto más cerca está el pitido final: el 21% de los goles recibidos por los blues en la competición doméstica llegaron en los 10 últimos minutos de partido. Al Chelsea, cuya media de edad raya los 29 años, los partidos se le hacen largos.

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