Márquez coge velocidad
El subcampeón de Moto2 vuelve a subirse a la Suter para poner a prueba su visión Jueves y viernes se entrenará en Albacete
Ya no existen secretos con las nuevas tecnologías, sobre todo con la llegada de Twitter. Que se lo digan a Emilio Alzamora y a todo el equipo de mecánicos de Marc Márquez, que llevaba en secreto el primer entrenamiento del año del joven piloto sobre su Suter. Hasta que un pajarito lo pio en la red social, con foto incluida, para evitar especulaciones sobre su veracidad. James Westmoreland, un piloto británico de Superbikes, que se encontraba desde el lunes entrenándose en el circuito de Alcarràs, en Lleida, escribía esto a primera hora de la tarde de ayer: “Es muy guay que Márquez vuelva a subirse a su Suter Moto2 en Alcarràs”.
Y allí estaba el chico, feliz por volver a montar en una moto de 600cc, como ya habían hecho sus rivales en los primeros entrenamientos de pretemporada de los que él tuvo que ausentarse por no haber recuperado totalmente la vista. Tras regresar al asfalto y a la moto con la que peleó por el título hasta que un accidente en Malasia fulminó todas sus opciones de corona –no había vuelto a montar desde entonces, el pasado octubre, cuando empezaron sus problemas de visión doble-, Márquez viajará hoy a Albacete, donde realizará un test privado el jueves y el viernes de esta semana. Según explica el equipo en un comunicado, Márquez estuvo en Alcarràs “para verificar si está preparado para hacer un test real, en el cual el objetivo será valorar su estado de recuperación”.
Hasta entonces, tanto el corredor, subcampeón de Moto2 en 2011, como su entorno habían explicado que sus problemas de visión persistían aunque habían mejorado ostensiblemente desde que fue intervenido quirúrgicamente el pasado 16 de enero. El gran inconveniente, explicaba el chico, de 19 años, en un acto con uno de sus patrocinadores celebrado hace dos semanas, era levantar la mirada, una posición en la que todavía no veía a la perfección y que es muy utilizada en el motociclismo de velocidad cuando el piloto acopla su cuerpo en el carenado en plena recta o a la salida de las curvas, con el cuerpo inclinado y la cabeza erguida.
Fue operado en enero, pero el gran problema era levantar la mirada
Pero Márquez recibió el lunes el visto bueno de los médicos para volver a subirse a su Suter, la moto con la que pretende atacar el título también este año. Y su equipo, que tenía todo dispuesto para cuando llegara este día, no se lo pensó un minuto. Ayer se desplazaron a Alcarrás para iniciar la pretemporada sobre asfalto. Si bien el chico dio sus primeras vueltas con una moto de supermotard antes de probarse con la máquina de 600cc. Según explica el comunicado del equipo, dio ocho vueltas al trazado leridano, que se encuentra muy cerca de casa del piloto, natural de Cervera, y donde ya había estado practicando supermotard en otras ocasiones este invierno, en el que sus sesiones de trabajo han sido a base de entrenos con motos de este tipo y de cross, que no le exigían forzar la vista. Además de muchas horas de gimnasio y sobre la bicicleta. Ahora ya puede volver a coger algo más de velocidad.
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