De Kim Kardashian a Ricky Rubio
La escasa capacidad de concentración del público y la falta de creatividad de los medios, hace que las historias llamativas dominen los titulares
Las cosas de las que la gente debería hablar y las cosas de las que la gente habla son, a menudo, muy diferentes. Por ejemplo, en Estados Unidos, la gente debería estar hablando del rescate griego, de los abusos contra los derechos humanos en China, y de la posibilidad de un ataque militar israelí contra Irán. Pero de lo que hablamos es de Kim Kardashian.
Los deportes no son diferentes. Gracias a la escasa capacidad de concentración del público y a la falta de creatividad de los medios de comunicación, las historias llamativas dominan los titulares. Muy pronto, todo el mundo hablará de lo mismo. (Probablemente de Jeremy Lin).
Lo único que detiene la carrera hacia la homogeneidad de las noticias es una pausa, un botón de reinicio. La pausa del All Star de la NBA es ese botón de reinicio. Con esto en mente, cuatro ejemplos de cosas de la NBA de las que la gente ha estado hablando, junto con algunas sugerencias sobre las cosas de las que debería estar hablando.
De lo que la gente ha estado hablando: Jeremy Lin. De lo que debería estar hablando: del largo y lento declive que se avecina.
El declive al que me refiero no es el de Jeremy Lin, aunque ese declive parece igualmente inevitable. No, me refiero al declive de la calidad del baloncesto a medida que esta temporada comprimida avanza y los cuerpos de la NBA ceden. Si una temporada normal de la NBA es la Segunda Guerra Mundial -explosiva, catastrófica y llena de espectaculares bombardeos aéreos-, esta temporada es la Primera Guerra Mundial: desordenada, turbia y con menos probabilidades de ser ganada por el bando con más habilidad y más probabilidades de ser ganada por el bando con más hombres.
De lo que la gente ha estado hablando: de los Thunder de Oklahoma City. De lo que debería estar hablando: de los Heat de Miami.
Los Thunder son divertidos de ver. La suya es una historia de perdedores, por la ciudad en la que juegan, porque Kevin Durant es un tipo majo, porque se parecen al equipo de los dibujos animados del sábado por la mañana. Pero da igual lo mucho que nos gustaría que fueran campeones de la NBA. Los Heat de Miami son demasiado buenos. Los Heat son la Estrella de la Muerte si la hubiera imaginado alguien que no fuera un guionista.
El talento más importante de Ricky es que entiende el baloncesto. Hace la jugada correcta casi todas las veces
De lo que han estado hablando: de los Clippers de Los Ángeles. De lo que deberían estar hablando: de los Spurs de San Antonio.
No hace mucho, vi a los Spurs arrasar a los Clippers durante la prórroga en Los Ángeles. Los fallos de los Clippers (juventud, técnicos, capacidad intelectual) eran menos evidentes que los puntos fuertes de los Spurs (precisión, coherencia, atención al detalle propia de un cirujano). Me marché del partido convencido de que si los Spurs pueden apañárselas para sobrevivir hasta las eliminatorias con un equipo razonablemente intacto, es posible que tengan suficiente potencia de fuego para perder ante los Heat en la final.
De lo que han estado hablando: de Ricky Rubio. De lo que deberían estar hablando: de lo que Ricky Rubio dice sobre el baloncesto.
Partiendo de la base de que uno es grande y fuerte y posee una coordinación de manos y ojos sobrenatural, el baloncesto no es tan difícil. Por lo general, la jugada correcta es bastante obvia. Posiblemente, el más importante de los talentos de Ricky sea que entiende esto. Hace la jugada correcta casi todas las veces. Algún día, todos los jugadores de baloncesto lo harán. Del mismo modo que, algún día, los estadounidenses dejarán de hablar sobre los trapos sucios de los famosos.
Hasta entonces, Ricky Rubio seguirá haciendo las cosas a su manera en la NBA. Y los estadounidenses seguirán hablando de Kim Kardashian.
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