Los 10 retos de 2012

El año de la Eurocopa de fútbol, de los Juegos Olímpicos de Londres, de los desafíos de Bolt y de Phelps contra la historia... el año en que Nadal intentará su regreso al número uno, en que Alonso luchará por hacer del Ferrari un coche ganador, en el que Pau Gasol y Navarro desafiarán el imperio de la NBA por una medalla de oro... el año en que Barça y Madrid persiguen de nuevo la Champions, en el que Tiger quiere volver a rugir... Las grandes citas deportivas se amontonan en 2012. Esta es la agenda de 10 momentos imprescindibles.

Eurocopa 2012: la cuadratura del círculo. A partir del 8 de junio, la selección española de fútbol se enfrenta a un desafío sin precedentes. La Roja, campeona de Europa en 2008 y del mundo dos años más tarde, aspira a revalidar el cetro continental en el torneo que tendrá lugar en Polonia y Ucrania y de paso, rubricar un éxito único. Ninguna selección ha logrado hasta el momento alzar una Eurocopa, un Mundial y otra cita europea de forma consecutiva. Un reto superlativo para los hombres de Vicente del Bosque, que en la fase de grupos quedaron encuadrados en el grupo C junto a Italia, Croacia e Irlanda, y que, a priori, encontrará en combinados como Alemania y Holanda sus rivales más fuertes en la pugna por el cetro. España aterrizará en la Euro con la aureola de favorita y una generación de futbolistas fabulosa, con el centro de gravedad en el centro del campo, pero su trayectoria en los últimos compromisos invita a la prudencia. Frente a la solvencia que exhibió en la fase clasificatoria -ocho triunfos en ocho encuentros ante Liechtenstein, República Checa, Lituania y Escocia-, La Roja chirrió en los amistosos contra equipos de mayor envergadura como Argentina (4-1), Portugal (4-0), Italia (1-0) e Inglaterra (1-0), además de tropezar en su último pulso frente a Costa Rica (2-2). Por si fuera poco, la fractura de tibia de David Villa, máximo artillero histórico de la selección con 51 dianas, abre un interrogante en el ataque. El Guaje, que cayó lesionado en el Mundial de Clubes, lucha contrarreloj para poder estar junto a sus compañeros en la final del próximo 1 de julio.

Barça y Madrid, camino a Múnich. Fulminada parte de la amenaza inglesa, apeados en la fase de grupos equipos de la talla del Manchester United y el City, son ahora el Bayern, el Milan, el Inter, el Chelsea y el Arsenal los aspirantes a toserles al Barça y el Real Madrid, los dos equipos españoles que siguen con vida en la Liga de Campeones y, a priori, los dos máximos favoritos al triunfo en 2012. Los azulgrana, que elevaron la última orejona tras ofrecer un recital en el estadio de Wembley el pasado 28 de mayo, contra los diablos rojos de Alex Ferguson, persiguen su quinto cetro europeo. De conseguirlo, los de Guardiola se situarían a la altura del Liverpool y dejarían atrás a colosos como el Bayern y al Ajax. Antes deberán solventar la ronda de octavos, en la que se medirán al Bayer Leverkusen (14 de febrero y 7 de marzo). El Madrid, el conjunto más laureado de la competición con nueve títulos, se verá las caras con el CSKA de Moscú (21 de febrero y 14 de marzo). Un equipo correoso, que incluye un exigente desplazamiento a tierras rusas y que tratará de interponerse en el camino del equipo blanco, derribado en la última edición en las semifinales por el Barça. En su segundo proyecto en el banquillo blanco, José Mourinho cuenta con un plantel excepcional, capaz de liquidar la fase de grupos con un pleno de victorias y que ahora apunta a la Décima, la gran obsesión de su hinchada y su mandatario, Florentino Pérez. La final se disputará el sábado 19 de mayo en el flamante Allianz Arena de Múnich.

Alonso y Ferrari, doble apuesta. Melbourne encenderá el semáforo verde del Mundial de fórmula uno el 18 de marzo y Brasil ondeará la bandera de cuadros el 25 de noviembre. Entre medias, 20 grandes premios, dos de ellos en España: en Cataluña el 13 de mayo y en Valencia el 24 de junio. Y un reto mayúsculo para Fernando Alonso y para Ferrari, destronar a Vettel y Red Bull. Cuando unieron sus caminos en 2010, el matri0monio entre el español, doble campeón mundial (2005 y 2006 con Renault), y la histórica escudería italiana parecía sinónimo de grandes éxitos. Pero la irrupción de Red Bull y del joven Sebastian Vettel ha teñido el Mundial del azul de las bebidas energéticas en lugar de rojo. Con una magnífica apuesta por la innovación y por los pilotos de su cantera de talentos, Red Bull ha dominado 2011 de manera incontestable. Ferrari y Alonso se quedaron sin decir ni mu, terceros en el Mundial de constructores, también por detrás de McLaren, y con solo una victoria en el zurrón, en Silverstone. La apuesta para 2012 es doble. Ferrari ha renovado su estructura interna, ha dado una vuelta al conservador diseño del F150 Italia y ha tomado nota de los fallos en el túnel del viento. Y Alonso se ha conjurado, a los 30 años, para sumar su tercera corona mundial, en su tercera temporada en Ferrari, y reverdecer el laurel logrado por Raikkonen en 2007 para la Scuderia. Junto a Alonso, en la parrilla habrá un cambio de apellido español. De la Rosa tomará un volante del equipo Hispania, mientras que Alguersuari está de momento fuera del 'circo' tras su inesperada salida de Toro Rosso.

El Tour de Contador. Primer día del año y primer entrenamiento para Alberto Contador. Después de dar las primeras pedaladas del 2012, sin dejar pasar ni una fiesta para el descanso de las piernas, el ciclista español colgó ayer en su perfil de Twitter una foto con su nuevo maillot, un azul oscuro con el que pretender levantar los brazos con el Saxo Bank de Bjarne Riis. Antes, a mediados de este mes de enero, deberá escuchar su futuro en los labios de los abogados del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que decidirá sobre su positivo por clembuterol en el Tour de 2010. Después de remover cielo y tierra con el argumento de que el positivo fue por una contaminación alimentaria a causa de un solomillo comprado en Irún, Contador fue absuelto por la federación española y ahora espera la libertad definitiva de cargos por parte del TAS, ante la negativa a la absolución de la UCI y la AMA. Mientras su futuro se debate en los despachos, Contador consume kilómetros y entrena cuerpo y mente. Si es absuelto, podría debutar en el Tour de San Luis, en Argentina, del 23 al 29 de enero. Sería el comienzo de una preparación encaminada a volver a reinar en el Tour de Francia, del 30 de junio al 22 de julio, una vez que el australiano Cadel Evans se vistió de amarillo en la última edición. Contador piensa solo en clave Tour, la reina de las grandes pruebas. 2012 será también el año del regreso de Alejandro Valverde al ciclismo a los 31 años, cumplida su sanción por su implicación en la Operación Puerto.

Bolt corre contra la historia. El hombre más rápido del planeta tiene 25 años y parece que solo corre contra sí mismo. Sus extravagantes poses, su manera de prepararse en los tacos, su vida fuera del tartán, en definitiva, su manera de correr, dan a entender que Usain Bolt es el único rival de Usain Bolt. El jamaicano encara la recta de los 100 metros contra su propia marca y contra la historia. La carrera de los Juegos Olímpicos de Londres marcará su lugar en el olimpo. Hasta que tome la salida vestido de amarillo y verde, la progresión de esta flecha humana de 1,95m está marcada por su papel en los dos últimos Mundiales. En Berlín 2009 hizo añicos cualquier cronómetro. Paró las manillas en un sideral récord de 9,58 segundos en los 100 metros, y en 19,19 segundos en los 200. Bolt era ya entonces el dios del atletismo. Pero, de camino a Londres, dobló las rodillas en el Mundial de Daegu, el verano pasado. Aunque volvió a ganar en el doble hectómetro, fue descalificado en los 100 metros por una salida falsa, en una de las mayores imágenes de la decepción deportiva en 2011. Bolt se cubrió el rostro con las manos y dijo que la ansiedad le había jugado una mala pasada a sus piernas. Ganó su amigo y compatriota Yohan Blake. El desafío de Bolt no es solo volver a ganar el oro en Londres. Es también correr contra la historia, retorcer el reloj hasta los límites del cuerpo humano y dejar un récord que perdure durante décadas. Tiene lugar y día. En Londres el 5 de agosto.

Phelps, frente a su leyenda. Los últimos Juegos Olímpicos de Pekín depararon una instantánea histórica. La imagen del nadador estadounidense Michael Phelps, posando con el torso al desnudo y ocho medallas de oro al cuello en la portada de la revista Sports Illustrated, apuntaba a una hazaña sin precedentes en el mundo del deporte. El de Baltimore rompió todos los registros en la última cita olímpica, en la que superó el récord que hasta entonces ostentaba el legendario Mark Spitz, al imponerse en las finales de los 400 metros estilos, 4x100m libres, 200m libres, 200m mariposa, 4x200m libres, 200m estilos, 100m mariposa y los 4x100m estilos. Cuatro años atrás, en Atenas, ya había conquistado seis oros y dos bronces en las ocho pruebas en las que participó. En total, 16 preseas olímpicas (14 oros y dos bronces). Una cifra esplendorosa que el americano, el mejor deportista olímpico de todos los tiempos con solo 26 años, aspira a engrosar en Londres. Allí nadará a la carta, seleccionando las pruebas, y se topará con un misil acuático llamado Ryan Lochte. El neoyorquino -tres oros, una plata y dos bronces olímpicos entre Atenas 2004 y Pekín 2008- desafió a Phelps en los últimos Mundiales celebrados en Shanghái. En esa cita logró cinco oros, por los cuatro de su compatriota, y le batió en los 200m libres, la prueba reina. Una amenaza para el de Baltimore, que se enfrenta al mayor de los desafíos: luchar contra su propio mito.

Las montañas de Nadal. Cuando su lucha por el número uno ante Roger Federer estaba en lo más alto, Rafa Nadal ya avisaba de lo que venía por detrás, un volcánico y rapidísimo tenista, ambicioso, consistente, lleno de golpes ganadores. El serbio Novak Djokovic ha dejado de ser una promesa y hoy es el número uno del mundo por delante de Nadal y de Federer. No solo eso. En 2011 se ha convertido en la peor pesadilla del español, derrotado en seis finales. Por primera vez, Nadal encara el desafío de un rival más joven, una situación inaudita para él, acostumbrado a tumbar a contrincantes con más galones. Djokovic es hoy para Nadal lo que Nadal ha sido para Federer en las temporadas anteriores. El reto de 2012 es múltiple. Se jugará en las pistas de los grandes y en la superficie olímpica de Londres, en la que Nadal defenderá el oro de Pekín 2008. Habituado a reinventarse, a Nadal le motiva más que nunca la retahíla de montañas que tiene por delante. Nada mejor para un competidor extremo, granítico, el chico que tiene miedo a la oscuridad o al mar y que en la pista se transforma en un coloso. Es la mentalidad que ha forjado su tío Toni desde que cuando era chico le obligaba a recoger las bolas de los compañeros de entrenamiento o a barrer de hojas la pista. El niño que soñaba con Wimbledon tiene todos los galardones posibles, a falta de la Copa de Maestros. En 2012 quiere volver al número uno.

El 'dream team' del baloncesto español reta a la NBA. El domingo 12 de agosto es la fecha marcada en rojo por la mejor selección española de baloncesto de la historia. Después de ser campeona del mundo (2006), europea (2009 y 2011) y plata olímpica (2008), la generación que lideran Pau Gasol y Juan Carlos Navarro se ha conjurado para seguir junta y encarar el mayor de los retos, discutirle el oro y la supremacía mundial a la misma NBA, a la espera de saber qué conjunto alistará Estados Unidos en los Juegos de Londres. El equipo español ha derribado hasta ahora todas las murallas y en 2012 ha encontrado una nueva motivación, el pesado oro olímpico. Gasol y Navarro aspiran a coronar un ciclo mágico, puesto que la selección deberá afrontar a partir de Londres el comienzo del relevo generacional con las vistas puestas en el Mundial de 2014 en España. A España le anima conquistar la cima a la que no pudo acceder Yugoslavia en 1992. La desmembración en repúblicas yugoslavas impidió con un conjunto con Petrovic, Kukoc, Radja, Divac, Paspalj y una larguísima lista de estrellas de primer rival pudiera retar al mágico 'dream team' de Magic, Jordan y Bird. Hoy en día los jugadores europeos llenan el escaparate de la NBA, territorio entonces todavía por conquistar. Pau, Marc, Rudy, Ricky, Ibaka... los españoles copan también la mejor Liga del mundo. España encara este año su gran desafío, el broche a un equipo de leyenda.

La vuelta de Tiger y el 'grande' español. El último grande español tiene fecha del siglo pasado. Olazábal, en 1999, confirmó en Augusta su historia de amor con el Masters con su segunda chaqueta verde. Fue la última tarde gloria en un grande para el golf español, el fin a dos décadas mágicas con los triunfos de Ballesteros y del mismo Olazábal, y también el inicio de una larga sequía. Han pasado 13 años y el golf español sigue picando en el circuito europeo (siete títulos el año pasado, la cifra más alta desde 1992), pero continúa estancado en las grandes citas. El Masters de Augusta (del 5 al 8 de abril), el Abierto de Estados Unidos (del 14 al 17 de junio), el Open Británico (del 19 al 22 de julio) y el Campeonato de la PGA (del 9 al 12 de agosto) serán las citas en las que el golf nacional intentará acabar con la deuda en 2012. Al frente de la armada estará un renacido Sergio García, que después de llegar a hartarse del golf ha vuelto a la vida y a finales de 2011 ha vuelto a ganar después de tres años en blanco. Le secundará Álvaro Quirós, un pegador que poco a poco va convirtiéndose en un gran golfista. Fuera del patio español, el foco estará puesto en Tiger Woods. El californiano encara su hora de la verdad: o vuelve a lo más alto en los grandes o acaba convertido en un jugador más, una sombra de lo que fue. El poder europeo, la eclosión de Rory McIlroy y la Copa Ryder en septiembre, con Olazábal de capitán, completan un curso con muchos alicientes.

Las dos ruedas sin SuperSic. El pasado 23 de octubre, un terrible accidente segó la vida del piloto Marco Simoncelli en el circuito de Sepang. Un acontecimiento que estremeció de arriba abajo al mundo del motociclismo, cuyos motores continuaron rugiendo en honor a SuperSic, al que muchos señalaban como una de las promesas más firmes de MotoGP y un posible heredero de Valentino Rossi, el más laureado de todos los tiempos con nueve títulos mundiales. Con la imagen todavía en la retina y el aplastante triunfo del australiano Casey Stoner en el último campeonato, Il Doctore busca en 2012 reencontrarse consigo mismo tras un año difícil a lomos de la Ducati. De nuevo tendrá enfrente a Stoner, que se impuso en 10 de las 18 pruebas del último ejercicio, y a los españoles Jorge Lorenzo y Dani Pedrosa. El balear, campeón en 2010 y el único capaz de plantar cara al australiano, exprimirá su Yamaha en busca de una nueva corona. El catalán finalizó cuarto y figura en una terna de candidatos entre los que también se encuentran Dovizioso, Spies, Edwards y Hayden. Las motos comenzarán a rodar el próximo 8 de abril en Catar. El calendario incluye cuatro carreras en territorio español: Jerez, el 29 de abril; Catalunya, el 3 de junio; Aragón, el 30 de septiembre; y Valencia, que pondrá el broche a la temporada el 11 de noviembre. En las cilindradas inferiores, los pilotos españoles tratarán de mantener el nivel mostrado en el último curso. Nico Terol aterrizará en Moto2 tras adjudicarse el laurel de 125cc. Allí coincidirá con Marc Márquez, que no pudo con Bradl en 2011. El joven Maverick Viñales, tercero en 125cc con solo 16 años, será otra de las grandes bazas.