"Sin brillo, misión cumplida"

La gente de Ponferrada acabó tan orgullosa de su equipo que la emoción se transformó en fervor regionalista, en sentimiento de unidad cósmica: fútbol, patria y folclore.

Borja Valle, la tercera generación de una saga de jugadores de la Ponferradina, abandonó el campo con lágrimas en los ojos. "La gente ha cantado A Ponferrada me voy, que, para nosotros, es un himno", decía el joven delantero, pecoso y rubicundo, "y para mí ha sido algo grandioso".

La multitud congregada en El Toralín, agradecida a los suyos, había hecho ondear las bufandas y había entonado las estrofas místicas: "A Ponferrada me voy a caballo en mi borrica / y a la Virgen de la Encina le cantaré una coplica".

Borja lamentó el gol fallado por culpa de una intervención apurada de Sergio Ramos: "¡Se me ha quedado atrás el balón y no lo he podido enganchar!".

Su entrenador, Claudio Barragán, antiguo delantero del Deportivo, estaba emocionado. "Esta afición es fría", comentó ahogado por la emoción, "pero hoy, cuando se han puesto a cantar, nos ha impresionado tanto que yo no me lo podía creer. Había jugadores acalambrados que han seguido corriendo por la energía que les ha dado el público. ¡Lo van a pagar el domingo!".

El técnico, los futbolistas y el público de la Ponferradina se retiraron pensando que quizá los resultados no son lo más importante en el fútbol.

El técnico del Madrid, José Mourinho, que ha construido su carrera y su prestigio en base a una estadística prodigiosa, celebró una conferencia de prensa en la que dijo: "¿Ánimos? De los últimos 17 partidos, el Madrid ha ganado 16". Así zanjó una pregunta sobre el efecto salutífero que tendrá el partido sobre sus jugadores, derrotados el sábado pasado (1-3) por el Barcelona en el estadio Bernabéu.

"Lo más positivo ha sido el resultado", apuntó, "y el modo serio en el que hemos cumplido nuestra misión. Sin brillo, sin nada del otro mundo, pero cumpliendo bien, con seriedad, sabiendo que teníamos que dar un paso adelante. Un 0-2 fuera ha sido un gran paso. Todos los jugadores han cumplido su papel. Ni pensaba en meter cuatro o cinco goles ni pensaba en que seríamos un desastre. Esperaba esto: 0-2 o 1-2".