El gol, un imposible

Granada y Racing firmaron las tablas en un duelo directo para abandonar el abismo de la Liga. Se enfrentaban los dos conjuntos menos goleadores de la competición y esta circunstancia se notó en un partido de mucha pelea y escaso brillo. Equipos muy bien construidos tácticamente, eso sí, con conceptos defensivos sólidos, pero con problemas manifiestos para generar juego con fluidez a partir de tres cuartos de campo.

El Racing, granítico, como todos los equipos de Héctor Cúper, siempre construidos desde atrás, ha sido capaz de dejar a cero en este inicio de campaña a tres de los cuatro equipos que han liderado la competición: Real Madrid, Levante y Betis. Y ha acariciado la victoria en estadios como Mestalla y el Sánchez Pizjuán. Los granadinos, por su parte, cargados de moral tras su meritoria remontada en Sevilla, comenzaron el choque con mucha decisión, como suelen hacer en casa, y con un punto de agresividad superior al de los cántabros. Mikel Rico, un jugador incansable, exhibió una evidente superioridad física y devoró metro a metro el centro del campo cántabro, que padeció durante toda la tarde la decisiva baja de su motor principal, el senegalés Diop, ausente en Los Cármenes por acumulación de amonestaciones.

Fueron los visitantes, sin embargo, los que dispusieron de la mejor oportunidad de la primera parte en un remate de Torrejón que se marchó a las nubes, cuando Roberto, héroe en el triunfo cosechado en Sevilla, estaba tendido en el suelo. Poca chicha en un partido que se fue durmiendo poco a poco, impregnado de monotonía, hasta que Martins e Ighalo decidieron agitarlo con un par de acciones que estuvo a punto de aprovechar Alex Geijo en boca de gol. El Racing, por su parte, intentaba responder con tímidas acciones por los costados, que acababan casi siempre en las manos de Roberto, y con los lanzamientos lejanos de Adrián y Tziolis.

En los minutos finales, los santanderinos se quedaron con un hombre menos, cuando Ariel fue expulsado tras una pugna aérea con Mainz. El atacante soltó el codo y Velasco Carballo fue inflexible. No aprovechó el Granada esta superioridad, tensionado por su falta de gol. Fue el Racing el que tuvo una ocasión clarísima para llevarse los tres puntos en el tiempo de descuento, en un contragolpe de cuatro atacantes para dos defensores. El lateral Francis, con todo a favor, no supo resolver, como los dos equipos a lo largo de toda la tarde.

Granada 0 - Racing 0