Javi Venta, un lateral bien caro

La carrera de Javi Venta (Pola de Siero, Asturias; 1975) ha estado llena de obstáculos. En silencio, humilde y constante, el lateral diestro ha sabido disimular sus limitaciones y amplificar sus virtudes hasta el punto de que, partiendo en desventaja, considerado siempre un recambio, ha terminado por conquistar el carril diestro durante 10 temporadas en la élite. "Javi Venta nos ha costado mucho dinero", ha manifestado en más de una ocasión y con sentido del humor, José Manuel Llaneza, el vicepresidente del Villarreal, haciendo memoria de la historia del conjunto amarillo en las últimas temporadas. "Siempre me lo recuerda José Manuel", confiesa entre risas Javi Venta, que regresa a El Madrigal, su casa durante ocho temporadas, por segunda vez con la camiseta del Levante, colíder de la Liga. En la anterior visita, en el curso anterior, el conjunto azulgrana venció (0-1) con una gran actuación suya. Tanto, que en algunos foros del Villarreal se preguntaban si el asturiano, a pesar de su edad, no podría haber seguido un año más en el conjunto castellonense.

"Toda mi carrera se la debo al trabajo", entiende Venta, que se curtió en la cantera del Oviedo. De ahí, se marchó al Marino de Luanco y a la Gimnástica de Torrelavega, en ambos equipos con Vicente Villamil, al que Venta le está eternamente agradecido. "Tuve una grave lesión y el Oviedo creyó que no debía seguir. Villamil, sin embargo, pensó que sí". En la temporada 1999-2000, ya con 24 años, Venta se enroló en el Onda, segundo equipo del Villarreal, por aquel entonces en Tercera División. Luego, se fue cedido al Racing de Ferrol en Segunda y, posteriormente, al Tenerife, ya en Primera. En el conjunto canario, que bajó de categoría, disputó 29 partidos, lo que le valió para regresar al Villarreal, al primer equipo, ya con 27 años. "Estoy orgulloso de haber crecido como futbolista a la vez que el Villarreal como club. Quedar segundos, disputar la Liga de Campeones dos veces... ha sido maravilloso", recuerda el defensa asturiano para quien Manuel Pellegrini, actual entrenador del Málaga, que le dio absoluta confianza durante cinco años, fue crucial en su carrera. "Pellegrini me enseñó muchas cosas. Me decía que jugara mucho sin balón y al espacio".

A Venta, temporada tras temporada, se le ha considerado un secundario, un cumplidor suplente y, al final, siempre ha acabado por convertirse en el lateral derecho indiscutible. "Xavi Roca y Galván en la primera pretemporada, Belletti, Armando Sá, Krompkan, Josemi y Ángel". Como una lista de sus damnificados, Venta enumera a todos los laterales por orden de llegada y salida. "Belletti era rápido, fuerte y técnicamente muy bueno. Ángel llegó como internacional y es un gran lateral que no está teniendo suerte con las lesiones", se arranca. Con ambos, con el brasileño en su primera temporada en el Villarreal y con el canario, en sus últimas tres de amarillo, alternó titularidad y suplencia. Por el medio se quedaron el portugués Sá, por el que el club castellonense pagó dos millones de euros, el holandés Krompkan (6) y los españoles Josemi y Ángel (3). "Fichaban laterales que costaban dinero. Partía siempre con desventaja, así que trabajaba más", recuerda Venta sin un ápice de rencor.

Tras desvincularse el curso anterior del Villarreal, donde jugó 184 partidos de Liga, una media de 23 por cada una de sus ocho años, encontró acomodo en el Levante. Allí empezó de suplente de Cerra y terminó disputando 33 encuentros. En el presente ejercicio ha llegado Pedro López del Valladolid para apuntalar el lateral diestro. Pero ahí, de nuevo, juega Venta.