Un pedazo de La Roja en Zorrilla

El próximo mes de noviembre se cumplirán diez años de la última vez que un futbolista del Valladolid debutó con la selección. Desde que Ricardo, el portero que ahora se desempeña en Osasuna, recibió en 2001 la llamada de José Antonio Camacho, nadie en el equipo blanquivioleta ha conseguido colarse en otra convocatoria de España, aunque uno de sus actuales futbolistas, Juanito, ganó la Eurocopa de 2008 cuando militaba en el Betis. Otros siete futbolistas del club forman parte, además, de los éxitos de la selección. Aquino, Bueno, Marc Valiente, Peña y Baraja se proclamaron campeones de Europa con las categorías inferiores de la selección, mientras que Álvaro Rubio y Varela ganaron el Mundial sub 20 en 1999. De todos ellos, sin embargo, solo Baraja jugaba en Pucela cuando logró el éxito. El Valladolid cuenta en sus filas, en cualquier caso, con siete futbolistas que han paladeado la gloria con las categorías inferiores de la selección, algo que no pueden decir clubes como el Barcelona o el Madrid, que cuentan con cinco futbolistas campeones de Europa o del Mundo con los equipos inferiores de España. Este domingo, los siete del Valladolid intentarán contribuir ante el Elche (12.00, Canal+) a que los blanquivioleta vuelvan a ganar, algo que no logran desde la tercera jornada.

"Todos los recuerdos que guardo de aquel campeonato son positivos, pero con la edad que tenía no sabía realmente lo que había conseguido ni con quién estaba jugando", lamenta Carlos Peña, campeón de Europa sub 19 en 2002 en Noruega con un equipo en el que estaban Iniesta, Jarque, Reyes o Fernando Torres. "Quizá, no lo viví de la forma tan intensa como debería haberlo hecho. Ahora, pienso que entre todos fuimos mejorando y que puse mi granito de arena en los éxitos de la selección", reconoce. El lateral izquierdo, que por aquella época jugaba en el Barcelona B, asegura que el equipo estaba "muy unido" y recuerda el día en que todos juntos fueron a ver "unos trampolines en los que se hacían saltos de esquí". "La verdad es que no hacíamos mucho turismo y me acuerdo de aquella excursión como algo gracioso", dice entre risas. De aquel grupo, solo guarda relación con Iniesta. "Siempre que me encuentro en algún campo con los demás, hablamos y recordamos viejos tiempos. A algunos sorprende dónde te los encuentras. Por ejemplo, hace unos años saludé a Solabarrieta, que estaba en el Palencia".

También Marc Valiente jugaba en el Barcelona B cuando se proclamó campeón de Europa sub 19, en 2006, junto a Mata, Capel, Javi García o Granero. En ese campeonato, formó con Piqué la pareja de centrales de la selección. "Fue un lujo jugar a su lado, pero lo venía haciendo desde pequeñito y siempre se vio que era un fuera de serie. Es algo que ahora sabe todo el mundo", asegura. En la actualidad, comparte vestuario en Valladolid con Alberto Bueno, que fue la sensación de aquel Europeo, en que se proclamó máximo goleador y fue nombrado mejor jugador. "Nunca hubiésemos pensado que coincidiríamos en Pucela cinco años después. Por entonces, mi objetivo era asentarme en el filial del Barça y saltar al primer equipo. Quizá eran unas metas muy altas", asegura Valiente.

El único futbolista de la cantera blanquivioleta que ha sido campeón con las categorías inferiores y aún sigue en el equipo es Javier Baraja, que ganó el Europeo sub 16 en 1997. "Aquel año fue muy especial porque, en el Valladolid, salté a División de Honor y fue increíble. Jugar de titular con 16 años teniendo de compañeros a gente de 18...", recuerda Baraja, que reconoce que, "después de tanto tiempo", el contacto con sus compañeros de selección se limita a cuando se ven en los campos. "Por nombre, en aquel grupo destacaba Casillas, que paró un penalti decisivo, pero había muchos otros que al final no han podido llegar a la elite", explica.

Un año después de que Baraja tocara la gloria, Álvaro Rubio se proclamaba campeón del Mundo sub 20 en Nigeria con la generación de Casillas, Xavi e Iniesta. Su caso, sin embargo, fue especial: se lesionó en el primer partido que jugó y tuvo que volver a España. "Me tocó ver la final desde casa, con mi familia y con una escayola. Imagínate la alegría que me llevé cuando ganamos", reconoce el centrocampista, que por aquella época jugaba de central. "Se puede decir que aquello me cambió la vida, porque después me estrené con la sub 21, dejé el Zaragoza B y fiché por el Albacete, con el que debuté en Primera", recuerda. De aquel equipo también formaba parte Varela, fichado por el Valladolid este verano pero que aún no ha podido debutar con el equipo por problemas con el transfer. Los siete campeones deben luchar ahora por un objetivo bien distinto del que tuvieron en su juventud: devolver al Valladolid a la elite. El Elche les espera.