_
_
_
_

Súdafrica, en cuartos e imbatible

Fieles a su estilo, los 'Springboks' ganan a Samoa (13-5) y cierran la fase de grupos sin derrotas

Sudáfrica posiblemente no despliegue el juego vistoso de los All Blacks, ni tenga la velocidad de pase del mítico rugby champagne francés, ni el talento de los australianos, pero son, sin lugar a dudas, uno de los equipos con menos fisuras de este Mundial. Con la victoria (13-5) frente a Samoa ha certificado su primera posición en la fase de grupos, ha eliminado a los polinesios y ha ahorrado trabajo a los galeses, que el domingo se medirán a Fiji sabiéndose segundos de grupo, y por tanto con el billete para cuartos en la maleta.

El juego de los Springboks ha sido el de siempre, un delantera fuerte en ataque e impenetrable en defensa, unos pateadores, Frans y Morne Steyn, muy fiables con el pie y un estilete en el ala, Bryan Habana. Enfrente, los samoanos no defraudaron en su planteamiento: jugaron con pases rápidos alejando el balón del potente pack de delanteros rival. Unas intenciones muy valientes, pero poco efectivas si los apoyos no llegan a tiempo o si los delanteros no ganan las fases estáticas. Ese fue el principal problema de los polinesios. Cuando ganaban metros, siempre eran más las camisetas sudafricanas que las samoanas y los gordos nunca fueron rival para sus homólogos Springboks. Estas carencias desembocaron en numerosos golpes de castigo. Un grave error cuando el contrario tiene pateadores de la calidad de Morne Steyn y Frans Steyn. Morne se ocupaba de los lanzamientos en campo samoano y solo falló un lanzamiento. Mientras que Frans era el encargado de los tiros de larga distancia; desde su campo anotó uno de tres intentos. Entre ambos sumaron ocho de los 13 puntos de su equipo.

La tensión era alta y los contactos duros, y no todos acabaron el partido. El árbitro tuvo que llamar a la calma en varias ocasiones a ambos equipos para que los rifirrafes entre los jugadores no fueran a más. Con ese ambiente, Peter De Villiers, el entrenador sudafricano, retiró a Habana, que había abierto el marcador con un ensayo en la primera parte, al inicio de la segunda para evitar males mayores ya que se había llevado dos golpes, de los que salió cojeando: uno luchando en el aire por un balón y otro tras ser estampado contra la valla publicitaria por un rival. Su sustituto, Hoogard, duró tres minutos en el campo antes de tener que retirarse también lesionado. Ese impás fue el que aprovechó Samoa para recortar distancias. El ensayo polinesio y los cambios provocaron unos minutos de desconcierto en las compactas filas sudafricanas, y a punto estuvo Samoa de anotar otro try más. Pero cuando peor estaban las cosas para los Springboks el zaguero samoano decidió tomarse la justicia por su cuenta y vio la primera roja del Mundial por agredir a un rival, dejando a su equipo con 14. Un nuevo vuelco al partido, que el sudafricano Jon Smit se encargaría de igualar al ver una tarjeta amarilla, que supone una expulsión de 10 minutos, por una acción infantil. El veterano pilier pateo el oval con el juego parado en el minuto 70, con lo que no volvería al campo.

Pero en este juego, lento, feo y trabado también son expertos los sudafricanos y tantos vaivenes acabaron sacando del partido y del Mundial a los samoanos que, pese a todo, en un último arreón acabaron el partido en campo Springbok. Sudáfrica cumple con los pronósticos y se clasifica primera de grupo ganando todos los partidos y, además, ha despejado todas las dudas que levantó en su primer partido contra Gales. Ahora solo le queda esperar rival, algo que no sabrá hasta el domingo cuando se cierre el grupo C con el partido entre Irlanda e Italia, aunque posiblemente su rival sea Australia.

El sudafricano Frans Steyn recibe el placaje del samoano Maurie Fa'asavalu.
El sudafricano Frans Steyn recibe el placaje del samoano Maurie Fa'asavalu.KIM LUDBROOK (EFE)

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_